Corazón Oscuro (Libro 1 de trilogía "Latidos del corazón")

Capitulo 47

Un año después...

—No sirvió de nada estudiar toda la semana, el examen estuvo demasiado complicado y les apuesto a que voy a dejarlo—dice Lara que camina a mi lado.

—Los temas del doctor son demasiado complejos así que por teoría serán difíciles—se queja Martina mientras las observo con una sonrisa.

—No se preocupen que estoy segura de que las tres saldremos bien, nos estamos esforzando lo suficiente—digo para animarlas.

Las tres caminamos por los pasillos de la universidad que se encuentran llenos de estudiantes animados y algunos no tanto por esta semana de parciales.

Una semana de estrés puro para todos.

—Tu porque eres inteligente Irisha, estudiar enfermería es lo mas sencillo para ti—sonrió.

—Amo lo que estoy estudiando—me encojo de hombros—, pero no solo por eso se me hará fácil todo, acuérdense que he estado a nada de reprobar algunos exámenes.

—¡No mientas!—dice Martina con indignación—, sacar un 7 no es reprobar.

—¡Eres una exagerada!—la apoya la otra que se ha vuelto una de mis mejores amigas.

Hace unos meses las clases volverían a iniciar y con ello iniciaría mi oportunidad de estudiar lo que tanto soñé. Busque la universidad indicada para poder llevar mis estudios a cabo y gracias a todos los santos la encontré. Claro que esta vez sin ayuda de Marcello porque si lo dejaba ayudarme ninguna universidad hubiera sido apta para mi

Escogí esta universidad semi privada con la cual estoy mas que complacida, tiene las mejores clases y docentes capacitados que nos están enseñando todo lo que necesitamos para la carrera de enfermería, no ha sido fácil pero intento dar lo mejor de mi cada día.

Las 3 seguimos hablando de cualquier tontería o quejándonos hasta que llegamos al estacionamiento de la universidad, a lo lejos puedo observar la camioneta negra estacionarse donde suele hacerlo muchas veces, el baja del auto y siento que el alma me abandona el cuerpo al verlo tan guapo como siempre.

Su cabello negro va peinado ligeramente hacia atrás, su barba perfectamente recortada y sus ojos mas brillosos que nunca, lleva puesto uno de esos trajes oscuros que me fascinan ya que se ajustan a los músculos de su cuerpo, luce como un jodido Dios.

Suspiro enamorada.

—Irisha tu novio ya vino por ti—me informa Martina quien tiene una sonrisa coqueta en su rostro.

—Con el debido respeto tu novio es muy guapo—la apoya Lara que observa a mi hombre sin descaro pero ¿Cómo culparla?

—¿Cómo conseguiste un hombre así?—me encojo de hombros.

—Suerte tal vez—beso la mejilla de cada una—, las veo la próxima semana bellas.

Escucho sus despedidas antes de emprender camino hacia el hombre que me espera con un rostro de pocos amigos, de seguro ha tenido un mal día en la oficina.

—Ciao mi amor—saludo poniéndome de puntillas y besando sus labios con dulzura—, ¿día difícil?

—Estoy molesto porque me surgieron unos inconvenientes en Venecia y tengo que ir personalmente a resolverlos—se que no le gusta viajar y dejarnos solas a Chiara y a mi.

—¿Por cuanto tiempo te irías?—sus brazos rodean mi cintura pegándome a su cuerpo.

—Tres días o menos si logro arreglar todo—besa mi frente—, sabes que no me gusta dejarlas.