CAP 3

289 27 11
                                    


//Narra Catnap;;

Catnap/-

"Imbécil......"

Mantuvo a Dogday en sus brazos, pensando en cómo llevarlo hasta su casa. Finalmente, con mucha dificultad, lo arrastró. Catnap era más bajo y liviano que Dogday, lo que hacía la tarea ardua y pesada.

"You weigh too much!"

Exclamó el felino, intentando no soltar al can mientras lo arrastraba por las calles vacías hacia su casa. Cada paso era un desafío, pero no estaba dispuesto a dejar a su amigo en esa condición.

Después de lo que parecieron horas, finalmente llegaron. Catnap estaba exhausto, cada músculo de su cuerpo clamaba por descanso. Con las pocas fuerzas que le quedaban, llevó a Dogday al sofá de su casa, un mueble grande y cómodo para tres personas. Con cuidado, le quitó el abrigo y la camisa, revelando varias heridas que necesitaban atención inmediata. Le bajó ligeramente el pantalón solo para curar algunas heridas en las piernas, y luego se lo subió de nuevo.

Pasó alcohol por las heridas del pecho de Dogday, causando que el can soltara unos quejidos mientras permanecía inconsciente.

"Hmmmm..." Susurró el can en su letargo.

El felino se quedó embobado mirando los músculos prominentes del can, sintiendo cómo sus mejillas se volvían de un rojo intenso.

No pudo evitar sonrojarse mientras curaba las heridas, cada contacto con la piel de Dogday le hacía sentir mariposas en el estómago.

"Stupid dog! Just look in a mirror, Catnap, you're redder than a tomato!"

Se quejó histéricamente, tratando de calmar sus propios nervios. Terminó de curar las heridas y decidió dejar al perro sin camisa para que las vendas no se rompieran ni se salieran de su lugar.

Después, tapó al perro con algunas de sus mantas más cálidas y le colocó varias almohadas alrededor para asegurarse de que estuviera cómodo en el sillón.

Catnap, agotado, se dirigió a su propia cama. Una vez allí, se permitió desahogarse, gritando como una niña en su almohada, su rostro completamente sonrojado. Todo por haber visto la mitad del cuerpo de Dogday sin ropa, algo que debería ser normal pero que lo había dejado completamente turbado.

Finalmente, se llamó a sí mismo idiota y trató de dormir. Afortunadamente, él tenía la habilidad de dormirse en cuestión de segundos, y no tardó en caer en un sueño profundo.

A la mañana siguiente:

"¡Oye! ¡Chaval! ¡Que es de día y ni siquiera me has hecho de comer mujer- ok no JAJAJA, bueno pero tengo hambre, Cat!" bromeó el can con una sonrisa traviesa en el rostro.

Catnap, quien recién se estaba despertando, casi sufrió un ataque al corazón al ver a Dogday despierto y todavía sin polera.

"¿T-tu qué haces despierto?" dijo el felino, tratando de calmar su corazón acelerado.

"¡Pues tengo hambre!" respondió el glotón can, con una risa.

"Veré si te puedo hacer algo..." murmuró Catnap, aún un poco aturdido.

Se dirigió a la cocina y empezó a preparar un desayuno para Dogday. Mientras cocinaba, no podía dejar de pensar en lo sucedido la noche anterior. Recordaba cómo había sentido cada músculo de Dogday bajo sus manos mientras lo curaba, y cómo su propio corazón había latido con fuerza.

"¿Por qué me pasa esto?" se preguntó en voz baja mientras batía los huevos.

Al poco rato, Dogday apareció en la cocina, todavía sin camisa, rascándose la cabeza y con una sonrisa perezosa.

"¿Qué estás haciendo, Cat?" preguntó, aunque el aroma del desayuno ya le daba una idea.

"Desayuno para ti, glotón," respondió Catnap con una sonrisa cansada, tratando de esconder su sonrojo.

"¡Eres el mejor!" exclamó Dogday, sentándose a la mesa con entusiasmo.

Catnap sirvió el desayuno y se sentó frente a él, observando cómo su amigo devoraba la comida con gusto. A pesar de todo, estaba contento de poder cuidar de Dogday. Mientras lo veía comer, se dio cuenta de que, a pesar de sus sentimientos confusos, lo único que importaba era que su amigo estuviera bien.

Después de desayunar, Dogday se recostó en el sillón, con una expresión satisfecha.

"Gracias, Cat. Realmente necesitaba esto," dijo, cerrando los ojos.

Catnap sonrió y se sentó a su lado, permitiéndose un momento de tranquilidad.

"De nada, Dogday. Siempre estaré aquí para ti," murmuró, sintiendo una calma inesperada.

Mientras el sol de la mañana iluminaba suavemente la habitación, Catnap se dio cuenta de que, aunque las cosas podían ser complicadas, su amistad con Dogday era lo más importante. Y eso era suficiente para él.

//////

Que les parece el capítulo?? Creo que los dejé mucho tiempo sin capitulo y pues les traje este tan bonito

Bye!

★彡『 Dᴏɢᴅᴀʏ x Cᴀᴛɴᴀᴘ 』彡★ //El Cambio De Mi Historia//Where stories live. Discover now