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Este capítulo tiene mucho que ver con unas fotos. Solo que no en una piscina:

 Solo que no en una piscina:

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🌻💛









Félix se escabulló al baño, el enorme jacuzzi lo tentaba demasiado. Así que, después de comer algo y el buen revolcón que le dio Cancelo. Decidió venir al baño, el lugar era grande casi como la habitación principal. Brindaba una vista más privada pero eso no quitaba que fuese extraordinario. Se quitó la camisa que se puso recientemente para cenar y cargó el agua. Aunque su impaciencia lo llevó a meterse al mismo antes de que se llenara. 

Se relajó contra el borde, disfrutando de cómo el agua y las burbujas cubrían su desnudez. Había escuchado a João decir algo sobre beber, no prestó bastante atención. No cuando estaba mordiendo sutilmente el hombro del mayor. Claro que era innecesario escucharlo. 

Cerró sus ojos y no se inmuta cuando escuchó la puerta abrirse, el sonido de las copas y seguidamente el líquido verterse en ellas. 


—¿Quieres un poco, Mô? —Cancelo preguntó. El aroma a Canela era tan fuerte que Félix se sentía mareado. El efecto de los inhibidores iba pasando de a poco y era muy normal que los alfas liberan sus aromas sin percatarse. Su omega ronroneo y se sonrojo cuando pudo sentir el líquido caliente escurriendo de él. Era un calenturiento. Abrió los ojos solamente para ver a Cancelo sentado en el borde. 


—Un poco y tú en la bañera conmigo. —pidió con una voz suave, el alfa sonrió de lado y se inclinó para dejar un casto beso sobre sus labios. Mismo que no dudo en corresponder, prolongando hasta que Cancelo se apartó con una sonrisa boba en su rostro. 
El vino fue vertido en la otra copa y él se movió para darle espacio al alfa. Su propio aroma poco a poco se acoplaba al del mayor, Cancelo se desnudó y entró detrás suyo. 

Abriendo sus piernas para darle espacio entre ellas y él pueda recostar su espalda contra el pecho del alfa. 
Tomó la copa y bebió despacio, Cancelo derramaba con sus manos agua sobre su hombro. Dejando una que otra caricia. 

—Sempre desejei ser assim com você, achava que era impossível. —El alfa habló, seguidamente beso con amor la piel expuesta. Sin dejar rastro sobre la misma. 

—Ah, ¿por quê? —preguntó en tono bajo, ladeo su cabeza y le dio todo el acceso a su cuello. Cancelo pasó a besar su glándula omega, dejando pequeños mordiscos sobre la zona, no pudo evitar ronronear complacido. 

—Porque é você, Mô. É tão fácil querer você, querer ter você em meus braços, ser só seu e você ser meu ômega, só meu. —una sonrisa amarga se dibujó en el rostro de Félix. No hace mucho alguien le decía que nadie lo querría, que nadie quiere a un traidor. Y viene Cancelo a decirle esto, que es fácil amarlo. Como si fuese real, apretó sus labios ante la creciente emoción en su pecho, sabía que estaba cerca de verlos. Que eso significa que su omega vuelva a esconderse por miedo, sabía que ahora esta era su familia. Todos eran amables con él, pero simplemente estaba esa espina, esa que no le dejaba confiar. Se perdió tanto en sus pensamientos que solamente volvió a la realidad cuando Cancelo acarició su bajo vientre y habló suavemente en su oído;
—Acontece alguma coisa? Você está muito pensativo e um pouco tenso, sabe que pode... 


—Foda-me, até eu perder a cabeça e parar de pensar no passado. 


El repentino pedido y el movimiento de Félix, tomó desprevenido a Cancelo. João no le dio tiempo de reaccionar rápido cuando ya lo estaba besando. El sabor del vino mezclado en su boca, Félix causó fricción entre sus cuerpos. No fue muy fácil retenerlo, aunque la protesta y el leve puchero del más joven le hizo ceder. 
Tomó de los glúteos a Felix y lo amasó en sus manos, el beso está vez fue más desordenado y duro. El omega continuaba rozando sus partes en busca de provocarlo más. Cancelo no demoró en darle lo que pedía su cuerpo, levantó al menor y lo ayudó a alinear su polla en su entrada. Estaba arriesgándose en hacerlo sin condón pero estaba ansioso por estar dentro de Felix, una vez más. 

La unión hizo gemir a ambos. 


—Deus, Mô. —jadeo contra la boca del menor, lo tomó del pelo y provocó que ladeó su cabeza. Félix se adueñó de los movimientos de subida y bajada mientras el agua chapoteaba al caer por el borde del jacuzzi. 
Cancelo se ensañó en lamer y besar el del menor. Aunque no mucho después pasó a torturar los pezones del más joven. Félix jadeaba desesperado, buscando mantener su estabilidad pero sin querer perder aquel contacto de la boca ajena con su pecho. 

El agua salpicó por todos lados mientras João lo empezó a ayudar, apretó su cadera y hundió sus dedos en su piel. Ayudando a que las penetradas fueran más profundas y le hicieran perder el aire. 

El toque constante sobre su próstata provocó un temblor en su cuerpo. 


—Gypsy... ah, Gypsy... —su mente se nublaba con constancia, hundió sus dientes nuevamente en el hombro del alfa, era el único sostén que se le ocurría. Ya que sus manos regalaban por los bordes, al igual que sus pies para impulsarse, Cancelo cambio la situación a su favor, le dio la vuelta, pegando su pecho contra el frío mármol. Cancelo entró en él de nuevo, la ventisca fría que se colaba por la ventana en lo más alto, erizo su piel. Busco manera de sostenerse mientras el alfa se introducía, brusco y fuerte. 
El chapoteo errático de agua entre sus cuerpos, la forma en que se lo follaba. Sin reparos, haciendo estragos en su mente y cuerpo. Tembló cuando sintió el primer estirón en su bajo vientre, la sensibilidad se apoderó de su cuerpo cuando Cancelo empezó a masturbarlo. 

Redujo la velocidad de las penetradas, aumentando su temblor. Gemidos incontenibles salían de su boca, y el gruñido bajo del alfa mezclado con su aroma aún más fuerte que antes, le dio todo lo que necesitaba para terminar. Derramando todo el semen en el agua. 
Cancelo lo siguió, pero contrario a correrse en su interior terminó en el agua. 

Agradeció mentalmente aquello, aunque su cuerpo se desplomó con facilidad. Todo el ajetreo del día le estaba pasando factura. 


—¿Estás bien, Mô? —preguntó con suavidad el alfa cuando lo tomó en sus brazos. Ambos salieron del agua, Cancelo cargandolo como una princesa. 


—Todo genial, Gypsy. —murmuró, se aferró a los hombros del mayor cuando este lo puso de pie bajo la ducha. El agua tibia recorrió su cuerpo y Cancelo lo ayudó a bañarse, el temblor en sus piernas seguía tan presente. 
Cuando terminaron, el mayor lo cubrió con una de las batas, él estaba seguro de que en cualquier momento iba a ceder, sentía todo su cuerpo pesado. 

El alfa lo llevó a la cama y lo acostó, después lo cubrió con cuidado. Quiso protestar cuando lo dejó solo. Pero ni eso podía hacer, ya no tenía fuerzas. El cansancio mental que tenía sumado al físico lo derrotó. 

Aunque entre sueños sintió como su cuerpo era movido, unos brazos fuertes se aferraron a su cintura y la piel cálida del pecho de Cancelo se unió a su espalda. 

El ronroneo del alfa fue lo último que oyó antes de dormirse totalmente. 


—Te amo tanto Félix... tanto que debemos tener esa conversación que has evitado por estos meses. —murmuró Cancelo acariciando la mejilla del menor, dejó un último beso en el hombro del omega y cerró sus ojos. 















Continuará....



El coito aquí significa: se viene drama.





Pato🌻

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⏰ Ultimo aggiornamento: May 20 ⏰

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