confesiones 1

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La mañana transcurrió entre risas, paseos, alguna que otra mirada entre las adultas y después entre madre e hijo.

Se sentaron en el bar de la familia de la rubia, decidieron que sería bueno almorzar fuera de casa ya de paso Luisi decidió llamar a su madre para ver si querían bajar y acompañarlos pero la mujer estaba demasiado ajetreada aun así le pidió el favor de bajar a su hermana Cata pues últimamente estaba muy rara y la madre ya no sabía que más hacer para que le contase que le pasaba.

- Voy a subir un momento a por Cata, mi madre dice que lleva unos días rara y no sabe que hacer ya para que le cuente que le pasa.

- Perfecto cariño, me quedo yo aquí con Lino?

- Claro como tú quieras -Lino quédate con tu madre que voy a por tu tía un momento vale? No la hagas enfadar, dijo la rubia mirando a la morena con una sonrisa y después dándole un beso.

- Mamá, hola, dónde estáis?

- Aquí hija, estamos en la habitación de tu hermana.

- Hola granuja, cómo estás?

- Bien hermana, mamá me ha dicho que voy a almorzar contigo y con Lino?

- si cariño, con nosotros dos y con Amelia.

- Bienn!!!! - la madre y la hermana se quedaron mirándola después se miraron entre si y sonriendo.

Las dos hermanas salieron ya de casa para reunirse con Lino y Amelia en el bar donde las esperaban ya.

Cata no paraba de mirar a su hermana en el ascensor.

- Dilo Cata,  que quieres preguntarme? Cata se puso el dedo en la barbilla en señal de pensar en preguntar o no, o mas bien de como preguntar lo que tenía en mente.

- Amelia es tu novia? - la rubia la miró con la boca abierta sin esperar que su hermana le saliera con esa pregunta.

- Saliendo ya del portal Luisi la paró y se puso a la altura de la hermana, te contestamos eso Amelia y yo si tú nos cuentas o me cuentas por qué estás tan rara últimamente, mamá está preocupada Cata y si no nos cuentas nada no podemos ayudarte.

La niña bajo la mirada, sin saber si aquello lo debía contar o no y como le podría afectar a su hermana lo que le pasaba ella.

Llegaron a la mesa donde estaban Amelia y Lino, saludando entre si los niños y después Cata dándole un beso a la morena.

Los cuatros pidieron el almuerzo y mientras le servían el almuerzo se pusieron a hablar.

- Amelia, Cata quiere preguntarnos algo pero no la dejaremos hasta que ella decida si puede contarnos lo que le preocupa.

- Muy bien, - Amelia miraba a Luisi embobada, la rubia notaba algo más especial en su mirada, algo que no sabía bien que era pero que le encantaba.

- Yo quiero preguntar una cosa que de ser así me haría muy feliz, pero de lo que me has dicho Luisi podemos hablar después cuando estemos solas?.

- Perfecto, pregunta lo que quieras y después hablamos tú y yo, de acuerdo?

Adelante Cata, dime qué quieres saber?

Cata miró de un lado y otro mirando a ambas adultas, Luisi ya sabía que era pero la morena estaba expectante, por otra parte la rubia quería saber la respuesta de su acompañante.

- Yo.... Quería saber si mi hermana y tú sois novias?  - lo dijo mirando de una a la otra con una sonrisa picara.

- Si, son novias, Amelia es mi mamá ahora también y estoy muy muy feliz por eso - el niño estaba dando saltitos en su silla.

La Vida Puede Cambiar En Un MinutoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora