capítulo 31

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Los minutos pasaban convirtiéndose en horas, las horas en días, los días en semanas y las semanas en meses.

SungHoon ya tenía dos meses de embarazo, su estómago no había crecido tanto, pero se podía observar una pequeña curvita en su vientre la cual Jake amaba llenar de besos y caricias.

Como ahora.

¿Qué nombre quieres ponerle?

No lo sé, ni siquiera sabemos si es un niño o una niña.

Por si acaso tenemos que elegir nombre para ambos géneros.

Jake estaba sentado en la cama con SungHoon entre sus piernas, el peliazul daba leves caricias al vientre del mayor por debajo de su camiseta -que más bien era de Jake- haciéndolo sentirse cómodo cada vez que sentía el anillo de Jake rozar con su piel.

Creo que debemos pedirles su opinión a los chicos dijo SungHoon.

Unos días después de que se enterasen de la hermosa sorpresa se lo contaron a los tres menores quienes reaccionaron casi de la misma forma que la pareja, pero bajándole un poco a la emoción.

Jake a veces pensaba en cómo iba a mantener a su próxima familia, apenas estaba acabando el primer año universitario de los cuatro que debía concluir, si hubiera sabido que SungHoon podía quedar embarazado tal vez se hubieran protegido para asegurarle un mejor futuro a su pequeño hijo, pero tampoco se arrepentía de nada, estaba seguro de que saldría adelante, nada malo podría pasar.

Tenemos hambre.

Jake se rió enternecido. Siempre que SungHoon quería decir que tenía hambre, sueño o alguna otra cosa lo decía en plural incluyendo al bebé que estaba en su vientre, justo cuando el menor pensaba que SungHoon no podía ser más tierno.

Ya mismo les preparo algo.

Pero no quemes la cocina.

Jake se levantó de la cama riendo aún más, SungHoon amaba molestarlo con su poca habilidad en la cocina. Comenzó a revisar lo que tenían en los estantes pensando que podría cocinarle a SungHoon, aunque claro, tenía que seguir la dieta que la nutrióloga les recetó y al parecer, ella también tenía una pareja la cual era uno de esos hermosos seres marinos, el libro no se equivocaba al decir que ellos estaban por todas partes.

El libro...

Jake abrió un cajón en la cocina encontrando ahí varias especias dentro de pequeñas bolsas y abajo de todas estas, estaba el dichosos libro olvidado.

¡Jake, trajimos comida!

El portazo lo asustó haciendo que el libro se tambalee en sus manos, pero logró sostenerlo antes de caer al suelo y lo guardo de nuevo en el cajón.

Ustedes no saben lo que significa tocar antes de entrar ¿verdad? el peliazul salió de la cocina a recibir a sus amigos o como a él le gustaba llamarlos, intrusos.

Ya, no te quejes, trajimos comida para los cinco.

Seis corrigió Sunoo a Ni-Ki. Al lado del rubio estaba JungWon entrelazando dedos con este, Sunoo aceptó a JungWon hacía ya una semana cuando descubrió que su corazón latía de la misma manera que el del pelirrojo cuando estaban juntos.

SungHoon está en la habitación, lleven la comida ahí, ya saben, antojos Jake sonrío.

Los menores hicieron caso y fueron en busca del pelirrosa para llenarlo de comida a él y a su pequeño, Jake iba detrás de ellos, pero se detuvo al sentir una vibración en su bolsillo. Sacó su teléfono de ahí, era una notificación de un mensaje de su padre.

Merman ◇ JakehoonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora