Una Pequeña Belleza [¡¡Solarballs!!]

capitulo 18

Luna corría más, debía de apresurarse no quería dejar sólo a Tierra, sentía que alguien más podría hacerle algo.

- ¿De verdad me alejé tanto? - se dijo así mismo.

Mientras avanzaba sentía que alguien lo seguía pero aún que miraba atrás, no encontraba absolutamente nada.

Pero al llegar, se sorprendió demasiado. Tierra estaba dormido, en sus muslos había algo blanco que tambien salía de su pequeño short, y lentamente se acercó a el con duda sino antes dejar su caja aún lado.

- eh... ¿Tierra?

Luna miraba a Tierra con duda pero el no respondía nada, sólo un silencio pero no incómodo. Lentamente se acercó por atrás de Tierra y se sorprendió demasiado al ver a Marte dormido tambien pero no en su órbita cómo siempre pero, el tenía una sonrisa boba en su rostro y un sonrojó leve. Eso lo preocupó pero igual, no le dió mucha importancia.

- ¿Luna?.. - Habló Tierra aún con sueño.

Luna miro rápidamente y directamente a Tierra a sus ojos brillantes y lindos, notó que el aún tenía sueño y era adorable su expresión. Tierra se estiró los brazos moviéndonos hacía arriba mientras bostezaba y eso hizo que Luna se pusiera rojo, ver esas pociones de su planeta lo sonrojaba tán sólo podía imaginar eso después de tener una relación con el.

- ¡Tierra, despertaste! Perdón si tardé demasiado, es que... ¿M-me perdí? ¡E-eso! Jeje.. - Habló Luna con una sonrisa.

- ah.. s-si, no te preocupes.. ¿Tienes lo que quieras mostrarme? - Pregunto Tierra con curiosidad.

Luna asintió con la cabeza alegre, sacó la caja y la extendió hacia Tierra con una emoción profunda. Tierra tomó la caja con curiosidad, era linda la caja, lentamente la abrió y se llevó una sorpresa gigante. En ella había un tipo vestido largo blanco brillante cómo la nieve, tambien abajo por el pecho del vestido había un accesorio cómo un círculo alrededor del vestido de color cómo el oro brillante y venía con un collar dorado brillante y era bastante lindo por su forma, era un círculo pero abajo venía un triángulo invertido.
Luna estaba mirando la reacción de Tierra, tan sólo verlo ya sabía que le gustaría y sin perder mucho tiempo:

- ¡Porfavor, pruébalo, Tierra! - Habló Luna con un sonrojó notable.

- Seguro, Lunita - le contestó Tierra con una sonrisa dulce.

Lentamente Tierra se fue con unos asteroides para cambiarse, primero se quitó su corto short y lo puso arriba de un asteroide. Luna que estaba allí se puso rojo al verlo y seguido por la camisa de Tierra, ahora sentía que le salía sangre por la nariz.

Cuando Tierra salió, Luna se sorprendió demasiado y se puso muy rojo y claro, le salió sangre por la nariz. Estaba sorprendido y emocionado tanto que sentía una pequeña erección en sus pantalones,no era notable para su sorpresa. Le quedaba bien a Tierra, resaltaba bien sus piernas y muslos brillantes y tan delicados y jugosos, tan sólo verlo Luna tenía ganas de agarrarlos y apretarlos hasta cansarse.