Apellido

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[Picos Fooljack, Grand Line]

Una habitación pequeña y oscura, con techos altos y suelo enmoquetado, que emana un aire bastante autoritario.

"¿¡Qué diablos están haciendo, tontos!?" —tronó un hombre en la mesa de directores. La habitación tembló de furia; Siguió la discusión ensordecedora; la tensión era palpable.

"El Gobierno es el paraguas que nos alberga; ¿¡cómo les podéis dar la espalda!?"

Las palabras, sin embargo, cayeron en oídos sordos.

Chad Bizárré vio al hombre a punto de quitarse la peluca e intentó calmarlo. "Ardemi, la ira no es buena para tu edad", aconsejó.

Otro de los más tranquilos añadió: "Bizárré tiene razón, tal vez podamos hablar de esto como hombres civilizados".

El funcionario enojado se puso aún más furioso: "¿¡Civilizado!? El gobierno está listo para matarnos en cualquier momento, ¡la calma de ustedes cuatro me supera!"

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Markus Goji, otro de los Cuatro Directores, no pudo evitar chasquear la lengua con decepción, dejando clara su postura.

Mientras tanto, Ardemi aplastó el papel que tenía en la mano, todavía encontrando increíble en qué se habían convertido estos cuatro.

"No sé qué les pasó a ustedes cuatro, ¡debieron haber caído en alguna ilusión!" gritó.

Newman Bradley asintió y abrió los brazos como si abrazara a su nuevo él.

"Estábamos en una ilusión, Ardemi", dijo Bradley en un tono apagado. "Una ilusión de avaricia y egoísmo; vender nuestras almas para engañar a las masas. ¿No es mejor hacer lo correcto por una vez?"

Vase Ah Liné estuvo de acuerdo con un profundo asentimiento: "Debo decir que cada uno de nosotros fue alguna vez un aspirante a reportero de la isla de Néa, pero caímos en el abismo de la codicia, del que solo salimos después de tantos años... Es realmente estimulante ¡Trae la verdad al mundo!"

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Ardemi estaba a punto de arrancarse el pelo.

'¿Cómo es posible que cuatro viejos zorros que hicieron todo lo posible para conseguir la mayor cantidad de dinero para manipular las noticias siempre que fuera posible se convirtieran en reporteros tan honestos?' gritó para sí mismo.

Antes de que pudiera continuar, Goji lo arrojó con un poco de agua fría: "Hoy se cumple un nuevo año y usted lo comienza con tanta furia que debo decir que su puesto como director ejecutivo de la Agencia Mundial de Noticias debería ser reconsiderado".

*¡Bang!* El puño de Ardemi se estrelló contra la madera prístina que pertenecía a la amplia mesa, provocando grietas.

El hombre miró a los otros cuatro con desconcierto y rugió: "¿¡Quieres sacarme de mi puesto!?"

"De hecho, tal vez sea necesario un reemplazo. Escuché a un joven y fogoso reportero abrirse camino a través de una gran cantidad de noticias, ¿cómo se llamaba? ¿Morgans?" reflexionó Liné.

Bradley bajó su taza de té con una sonrisa y comentó con aprobación: "Debo decir que esa determinación me recuerda a mi juventud".

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Ardemi no pudo evitar dar unos pasos hacia atrás, con las manos temblando ante la idea de ser despedido.

"No puedes hacerme esto. Yo comencé esta empresa... ¿¡Sabes cuánto sacrifiqué!?"

Sin embargo, sus palabras fueron recibidas con miradas en blanco.

"Oh, Ardemi. Por favor, no hagas esto más difícil de lo necesario", afirmó Bizárré con calma. "Lo anunciaremos mañana por la mañana en el periódico de Año Nuevo".

"Camino al poder"Where stories live. Discover now