Soldier III

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Dejé la llaves de casa en el mueble de la entrada, cerré mis ojos durante un segundo y me apoyé sobre la pared para respirar hondo y después soltar el aire.

Dirijo mi mano hacia mi barriga y aprieto mis labios conteniendo mis lágrimas, sé que era muy joven, pero nadie tenía el derecho a quitármelo.

Han pasado tres años y aún sigue doliendo como si fuera ayer. Cuando mi familia se enteró que estaba embarazada, y sobre todo, de un hombre más mayor que yo, no dudaron en solucionar el "problema", algo que nunca fue para mí, pero sabía que era una deshonra para ellos, y culparon a Harry de todo, de haberme corrompido y abusado.

Cuando vi como lo detenían y lo alejaban de mí, algo en mí se rompió, intenté que no sucediera, le dije que se fuera, que huyera, pero él quiso quedarse, creyó que el hijo que tenía en mi vientre, era un regalo que su ex mujer, fallecida, lo había mandado para él, y que yo era su comienzo de nuevo, a pesar de que le costó aceptarlo por la edad que tenía.

En cuanto cumplí los 18, huí de casa, no volví a saber nada de mi hermano, ni de mi madre. Gemma me acogió en su casa, nunca me culpó de nada, sabía que no tenía la culpa.

- ¿Estás bien cariño? - Suena la voz de Gemma y abro mis ojos para mirarla, mis ojos están brillantes, sabe que estoy a punto de llorar y se acerca a mí para abrazarme. - Yo también lo echo de menos. - Me agarro a ella con fuerza mientras dejo mis lágrimas caer y mis sollozos resuenan por toda la habitación.

- Nunca tuve que volver a buscarlo Gemma, todo esto es mi culpa, ahora él no estaría encerrado en una celda por un falso abuso. - Me separo de ella, y camino hacia el sofá, me siento en éste, y los recuerdos vienen a mi cabeza de nuevo.

Nunca sabré cómo hubiera sido mi hijo, cómo hubiera sido Harry de padre, nunca los veré correr por el salón, jugando, ya no tendré eso.

Enciendo la televisión, el canal de las noticias aparece, lo dejo de fondo, aunque no esté escuchando nada de lo que están diciendo, pero necesitaba ocupar mi cabeza con otra cosa.

" Han pasado tres años desde que el soldado de las fuerzas marítimas, Harry Styles, fue encarcelado por abuso a una menor, hoy, después de celebrar el juicio, lo van a dejar salir en libertad condicional por buena conducta."

Lo demás no logro escucharlo, porque mi corazón está a punto de salir de mi pecho.

- ¡Gemma! - La llamo varias veces, ella corre hacia mí asustada por si me había pasado algo y mira hacia la televisión escuchando la misma noticia que he escuchado yo. Después de que lo encarcelaran, no quise enterarme de nada más, pues tenía por entendido que no lo iban a dejar en libertad por mucho tiempo. Pero ahora, algo que nunca esperaba, no sé cómo reaccionar. - Tenemos que ir a por él, no puede salir y verse solo. - Me levanto con rapidez, andando de un lado a otro. - Coge tus cosas, tenemos que salir ya.

- Emery, para, no sabemos si será hoy, o si...

- Da igual Gemma, podemos esperarlo hasta que salga. - La cortó antes de que termine la frase. Voy hacia la entrada y agarro mi chaqueta. Cojo las llaves y me dirijo hacia la puerta, pero la mano de Gemma me agarra antes de que llegue a ella.

- Emery, relájate, estoy igual de sorprendida que tú, y quiero lo mismo que tú, pero tienes que pensar. Después de todo éste escándalo, no te van a dejar pasar, estará la prensa, solo querrán hacer preguntas estúpidas y si te ven allí, no vas a ayudar en nada, lo empeorarás. - Escucho sus palabras con atención y consigue relajarme, tiene razón, después de haber sido encarcelado por mí culpa, no le vendrá nada bien que yo esté ahí.

- ¿Pero y cómo sabremos que vendrá aquí?

- Está en libertad condicional, no van a dejarlo solo, lo enviarán con algún familiar, y yo soy lo único que le queda. Lo traerán aquí. - Asiento con la cabeza y me vuelvo a quitar la chaqueta dejándola donde estaba, supongo que solo queda esperar.

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⏰ Last updated: Jun 17 ⏰

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Harry's dirty (One shots) Where stories live. Discover now