Abuelo.

3.7K 254 12
                                    

Lucy.

"¿Ser libre?" Pregunto Zeus.

"Si" dije un poco cohibida, estaba muy nerviosa "quiero volver a donde estaba antes, imagino que habrá alguien que este preocupado por mi o algo así" dije rascando mi mejilla.

Pasaron unos minutos, Zeus me veía fijamente mientras estaba pensando en mi propuesta.

"Lo pensare" dijo con una sonrisa de lado haciendo que me sintiese aliviada "pero" dijo haciendo que me pusiese nerviosa otra vez "tendrás que aprender todo lo que es necesario para estar lista una vez que vayas a subir al trono" dijo mientras se levantaba de su trono y caminaba hacia mi. "Espero mucho de ti" dijo mientras apretaba suavemente mi hombro. Mire hacia arriba, si que era alto. El rió un poco y chasqueo los dedos. El sonido de un trueno hizo que soltaré un pequeño grito de sorpresa y la vez cerrase los ojos.

"Lucy Heartfilia" dijo la voz de Zeus. Abrí los ojos.

"Wow" dije sorprendida, se había encogido hasta llegas a ser unos centímetros más alto que yo, sonreí.

"¡Zeus si que eres bueno con la magia!" dije ingenuamente.

El soltó una estruendosa carcajada y revolvió mi cabello.

"Suenas igual que Jude cuando tenía tu edad" dijo feliz.

Sonreí, que bueno que esa mirada llena de tristeza ya no estaba en su rostro.

"Por cierto, si no te habías dado cuenta, tu te llamas Lucy Heartfilia, tienes 17 años y ahora eres mi nieta, puedes decirme abuelo"dijo con una gran sonrisa llena de ternura.

"¡Claro abuelo!" dije súper sonriente "por cierto, abuelo, ¿cuantos años tienes?" Pregunte ladeando la cabeza.
Soltó otra carcajada.

"Muchos" dijo mientras volvía a revolver mi cabello.

"Malo"le dije mientras hacia un pequeño berrinche.

"Te diré luego" dijo ladeando la cabeza igual que yo.

"Conste, ya lo prometiste" dije intentando parecer seria.

"Si, si"dijo, estaba segura de que nunca me diría "Guardianes" llamo Zeu...es decir mi abuelo a los dos guardias que, inmediatamente caminaron hasta llegar a nosotros. "¿Ya se han presentado?" Pregunto.

"Ya lo hemos hecho, king" dijeron los dos chicos mejor conocidos como Uta el súper lindo y kawaii que me da ganas de abrazar hasta el cansancio y Kuro, el sexy chico serio que hace que cuando sonría sienta que tendré una hemorragia nasal.

"Preparen a mi nieta, mañana tendremos una junta con los reyes slayers" dijo mientras hacia aparecer un báculo de la nada.

"¿Reyes slayers?" Pregunte sin entender.

"Si, ellos serán los encargados de entrenarte y hacer que te hagas fuerte... ¡Ha! También llamare al rey estelar, es necesario presentarte con todos" dijo lo ultimo entre murmullos.

"El hechizo de aquel gremio debió de haber desaparecido también, tendré que hacer algo con eso" murmuro otra vez. Parecía enfrascado en sus pensamientos, le hice una señal a Uta y a Kuro para dejar solo a mi abuelo.

Me despedí de mi abuelo, quien ni se inmutó de que le hablaba. Reí por lo bajo y salí de aquel cuarto acompañada de Kuro y Uta, quienes parecían mas animados que hace un rato.

"¿A dónde vamos ahora?" Pregunte mientras paraba de caminar en un pasillo.

Uta y Kuro intercambiaron una mirada para después asentir y hacer alguna mueca, como si estuviesen hablando mente con mente.

<<¿que diablos?>> pensé.

Si que son raros estos chicos.

"Hime" me llamo Kuro, quien tenía una sonrisa de lado. "¿Tiene hambre?" Me pregunto.

"No, yo no..." Decía, cuando mi estomago me interrumpió dando un enorme ruido. "Etto... Yo... Creo que si, vamos a comer" dije toda roja.

Uta y Kuro comenzaron a reír como dos locos, haciendo que todo lo guapo que tenían se fuese al caño.

Camine por el pasillo, dejando a esos dos maleducados muchachos en ese pasillo.

Camine un rato, subí por unas escaleras que parecían algo oscuras para este lugar tan brillante, al llegar al final de las escaleras me encontré con otro pasillo.

<<vaya, si que hay pasillos en este lugar>> pensé un poco cansada.

Llegue hasta el final del pasillo, que cada vez se hacía más oscuro y siniestro. Hay una puerta con un candado, algo me decía que era mejor salir de allí, pero por otra parte... Siempre he sido muy curiosa.

Toco el candado, que en un instante se abre ante mis ojos, sonreí triunfante. Abro la puerta, curiosa de saber que es lo que se esconde allí.

"¡Espere!" Grita alguien tras mi espalda haciendo que diera un salto del susto.

Volteo a ver quien es, mis dos guardianes vienen hacia mi con el ceño fruncido y un aura tenebrosa les rodea, retrocedo un poco mientras cierro la puerta.

"Casi" murmuro para mi misma.

"Nada de casi, Hime." Me riño Kuro "¿sabe lo que hubiera pasado si entra a ese cuarto sin el entrenamiento adecuado?" Me pregunto muy enojado y con los ojos saltando chispas.

"No, no lo se. ¿Dime que me hubiera pasado?" Le pregunte neutral.

"No lo esta tomando con seriedad, Hime" me dijo Uta enojado "podría haber muerto o peor, pudo haberse quedado atrapada allí para siempre" susurro lo ultimo Uta con ojos cristalinos, parecía un niño pequeño.

"Ya ya, tendré tiempo de arrepentirme después, ¿vamos a comer, si?" Dije con mi sonrisa mas linda.

Los dos parecieron pensarlo por un momento, como queriendo ver si les ganaba su enojo o su atención hacia mi.

"Vamos" dijeron los dos escoltándome de cada lado.

Suspire.

Me lo merecía por escaparme o algo así.

Cambio mágico «Stinglu».Donde viven las historias. Descúbrelo ahora