Carta #16

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Septiembre 21 del 2015.

Dos semanas. Dos semanas en las que estabas eufórica arreglando nuestra boda, cuando no quería que lo hicieras. Al menos mi madre te había ayudado. Ayer fue el día más hermoso y especial de mi vida.

Dos semanas tuve que esperar para que, por fin, reclamarte como mi esposa ante los ojos de todos. Sabía lo que se vendría. No sería momentos felices. Debes saber lo que pienso. Y por estas cartas es el mejor medio. Ahora te estoy viendo leer la carta anterior, mientras estás sentada en la habitación del hotel.

Nos encontramos en nuestro primer día de luna de miel. Te traje a la playa porque sabía que te encanta sentir la brisa del mar en tu rostro. Te quería hacer feliz. Sabía que no quedaba el tiempo. Este se estaba acercando a su fin.

No quería.

Pero tenía que aceptar que lo nuestro no tendría futuro.

Pero maldito sea el destino si no te hago feliz el tiempo que queda.


Cartas a un amor imposible ©Where stories live. Discover now