Una vida conmigo

capítulo 21: Corazónes en la mesa

Mi progenitor está furioso porque hemos preparado comida francesa. No entiendo cuál es el motivo de su enojo, ya que ambas culturas tienen su belleza. Nos sentamos a la mesa, Loki me ayuda con la silla como el caballero que es. Aún no puedo creer que alguien como él se fijara en alguien como yo; de verdad no lo entiendo.

—Así que, Loki, escuché que pronto irás a la universidad. ¿Tienes claro qué carrera vas a estudiar? —le dice mi progenitor mirando a Loki con desdén.

—Sí, señor. Planeo estudiar Informática. Encuentro que la combinación de lógica y creatividad en este campo es sumamente fascinante —dice calmadamente.

—Qué interesante, Loki. La informática es muy relevante hoy en día. ¿Tienes algún proyecto en el que estés trabajando? —dice mi progenitora, la que me dio la vida, pero lo dice con una sonrisa que no le había visto antes.

—Sí, cuéntales sobre el videojuego que estás desarrollando. Esa idea siempre me ha parecido increíble —comento con regocijo.

—Con mucho gusto. Actualmente, estoy desarrollando un videojuego que combina elementos históricos y mitológicos, con una narrativa inmersiva y compleja. Utilizo avanzados algoritmos de inteligencia artificial para crear una experiencia única y desafiante para los jugadores —dice Loki con esa sonrisa que me llena el corazón de satisfacción, porque sé que le apasiona de verdad este tema.

Mi progenitor interrumpe a Loki.

—Pero, Loki, ¿has pensado en cómo vas a mantenerte a ti mismo y a Camila? Estudiar algo tan... específico no parece muy práctico.

—Comprendo su inquietud, señor. La informática es un campo vasto y lleno de oportunidades. Planeo obtener becas y trabajar mientras estudio. Estoy convencido de que mi dedicación y pasión me abrirán muchas puertas en el futuro —dice con mucha calma Loki.

—Oh, pero el dinero no lo es todo, ¿verdad, Loki? Lo importante es que tú y Camila sean felices juntos. ¿No es así, cariño? —mi progenitora agrega a la plática, tocando sutilmente el brazo de Loki y mirándome con una sonrisa.

—Exacto, Loki siempre me hace feliz. Eso es lo que realmente importa —digo con una sonrisa de oreja a oreja, que mis hermanos se impresionan de ver, ya que poco sonrío en casa.

—Hmmm, ya veremos... —dice mi progenitor frunciendo el ceño y con ira palpable en su voz.

—Loki, ¿te gustaría más vino? Este es uno de mis favoritos, muy sofisticado, como tú —mi progenitora lo mira con interés mientras le habla en tono dulce.

—Claro, gracias. Me alegra que te guste esta idea. La verdad, ha sido uno de los proyectos más emocionantes en los que he trabajado —responde Loki, manteniendo la cortesía, mientras me mira.

—¡Sí, es fascinante! Deberían escuchar todo lo que está haciendo. Es realmente increíble —el entusiasmo se nota mucho en mi voz.

—Estoy segura de que lo es, querida. Loki tiene un talento especial para la informática, ¿verdad? —mi progenitora lo dice y termina la pregunta con una sonrisa sutil.

Terminamos la comida, ayudé a la Nonna con la cocina mientras mi progenitor se fue a su habitación, y mis hermanos, en compañía de mi progenitora, están con Loki en la sala. Me uno a ellos y pasamos un rato ameno. Al poco rato de unirme a la charla, mi progenitora se retira al patio de atrás con la Nonna.

Bug está en la PC jugando, mientras Revel, Loki y yo nos quedamos viendo la TV y conversando de temas varios.

Ya se estaba haciendo tarde y pronto le tocaría partir a Loki a su hogar. Al despedirnos, acompaño a Loki hasta la puerta del patio.

—Lamento mucho lo de hoy, por la situación dada —le digo con vergüenza y mirando al suelo.

—Mi estrellita, mi dulce amor, no debes bajar la mirada ante nadie, mi bella doncella. Tu mirada hace que mi corazón palpite. Pido con regocijo y encarecidamente no me dejes sin ella, ya que siento desfallecer si no la puedo mirar —dice con mucha ternura e intensidad, alzándome por el mentón.

Encontré su mirada tierna y los ojos se me llenaron de lágrimas. Di un largo suspiro y hice que aquellas lágrimas se desvanecieran de mis ojos. Sé que lo notó porque esperó con paciencia a que se desvanecieran. Sentí un ligero cosquilleo en la piel, donde sus dedos hacían contacto.

Mi corazón comenzó a latir más rápido. Sus ojos estaban fijos en los míos, y en ese momento, todo a nuestro alrededor se desvaneció. Solo existíamos él y yo. Loki se inclinó hacia adelante, sus labios rozando los míos con una dulzura que me hizo cerrar los ojos. El beso fue suave, tierno, como una caricia de terciopelo.

Sentí una calidez inundando mi pecho, una mezcla de amor y seguridad. Mis manos, casi por instinto, se elevaron para descansar en su cuello, queriendo acercarlo más, queriendo que ese momento durara para siempre.

Había una paz en su beso, una promesa silenciosa de que todo estaría bien. Podía oír su respiración tranquila, sentir el latido de su corazón sincronizado con el mío. Cada segundo de ese beso era un pequeño suspiro de felicidad, una confirmación de que este era el lugar al que pertenecía.

Cuando finalmente nos separamos, abrí los ojos lentamente, encontrándome con su mirada suave y amorosa. Loki sonrió, y yo supe que había encontrado mi refugio en él.