42 "Adrenalina"

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-¡No puedo creer que lo allas perdido!- grité gateando buscando mi regalo.

-¡Tu me lo tiraste!- se quejó.

-Si pero... Tu te burlaste de mi- me defendí.

-Como sea- noté como rodó los ojos.

-No hasgas asi los ojos.

-Mira como lo hago- comenzó hacer muecas graciosas. Reí mordiendo mi labio inferiror para evitar una carcajada- Eres insoportable a veces ¿sabes?- reí aun mas fuerte- pero graciosa... Mas cuando te frustras- lo miré entrecerrando los ojos.

-Harry- hablé como si se tratara de un bebé- Dime la verdad... ¿Encontraste el regalo, no es cierto?- asintió- ¡Diablos Harry! Hace mas de quince minutos que me estoy arrastrando y tu solo burlandote de mi- me crucé de brazos.

-Te amó- rió.

-Yo no.

-Hace menos de una hora estabas insistiendo que te perdonara.

-Es... Solo el cambió de continente- lo miré- Ya, abre el regalo- sacó la cajita azul de su bolsillo- en serió hay veces que tengo ganas de matarte- sonreí. Dentro de la pequeña caja sacó un collar en forma de cruz- Se que no es gran... cosas pero es igual al que se te perdió.

-Me encanta- se lo colocó- y... Dime ¿has visitado California aun?

-No, estuve toda la tarde preparando tu regalo- me tiré sobre la cama con los brazos extendidos.

-¿Que quieres hacer?- acarició mi espalda- podemos ir a cenar- negué con la cabeza.

-Ultimamente la comida me cae mal.

-Entonces ¿Que quieres hacer? Cerca de aquí hay una feria- se encogió de hombros- podemos ir.

-Eso sería estupendo - pensé- ¿Qué haremos con los chicos? Se supone que hoy saldriamos todos juntos.

-Nos escapamos solo tu y yo- susurró a mi oido haciendo estremecer mi cuerpo.

Cambié mi atuendo, me coloqué unos jeans azules, una musculosa roja con mis Vans negras y cogí mi cabello en una coleta. La noche era calurosa. Harry solo cambió su camiseta y se puso una gorra y unos anteojos para pasar de desapercibido.

La noche en California era perfecta, la feria quedaba junto a la bahía. Por lo que fuimos caminando.

Llevé mi cámara fotografía para no perderme ningún detalle. La foto que mas me gusto es en la que Harry logro ganar un peluche, su cara era tan graciosa, había discutido hasta con una pequeña de lo furioso que estaba, termino comprandole un dulce como disculpa.

-Tienes serios problemas Styles- sonreí mientras tomaba su manó.

-Esa nena me provocó- bufó- ¿Dónde quieres ir?- me encogí de hombros- Podemos ir... A la casa de terror.

-¡No Styles!- entré en pánico. El frunció el seño.

-¿Por qué? Acaso...¿Tienes miedo?- preguntó divertido ¡Claro que tengo miedo!

-No, claro que no- negué. No iba a permitir que se siga burlando de mi- solo recuerda mi.... Mi claustrofobia.

-El lugar no es tan pequeño- se adelantó a la fila- Ya se que tienes miedo, no te preocupes, yo te cuidare.

-No tengo miedo- dije entré dientes. El sitio no era tan espeluznante como pensé, era abierto. Las luces eran tenues y de color verde mientras una densa niebla tapaba la vista de nuestros pies. Tela de araña falsa colgaba de las paredes o de sarcófagos falsos- No da tanto miedo- dije una vez adentró.

-Te lo dije, estas cosas no asustan ni a un niño- el cadáver de una novia apareció de repente acompañado de un gritó ahogador- ¡Ahhhhh!- el gritó de Harry se ganó la miradas de todos los que se encontraban allí. Se colgó de mi hombro escondiendo su rostro en mi cabello.

-Pensé que tu me cuidarias a mí- solté una suave carcajada.

-Solo... Estaba preparandome para una película- reincorporo su postura sacando pecho- ya sabes- agravo su voz- esto lo de la banda.

-Si claro, como tu digas. Hazza.

Creó que luego de esa parada mi oído derecho quedó sordo. Después de tanto rogarle acedio a subirse a la montaña rusa. Desde mi puntó de vista daba vértigo, pero no me iria de aquí sin haberme subido a ese juego.

El rechinido de la vieja máquina nos avisó que ya estaba en marcha. Agarré con fuerza el brazo de Harry hundiendo mis uñas en el recibiendo un "Auch". El vagón comenzó a subir de lentamente, la adrenalina corría por mis venas. El juego llegó a su punto mas alto. Solo un movimiento y la acción comenzaría. Tres... dos...uno y los gritos de todos sonaron a las alturas. La fuerte velocidad hizo que la gorra y los lentes de Harry salieran volando, solo faltaron dos vueltas para volver tierra.

-¡Es Harry Styles!- un gritó proveniente desde la fila hizo alertar a ambos y a la muchedumbre que se encontraba a nuestro alrededor. Ganándonos todas las miradas.

-Esperó que hayas guardado un poco de adrenalina- tomó mi mano- porque ahora si la necesitaras.

Adios a Harry StylesWhere stories live. Discover now