El wag del campeón [Chestappen]

Capítulo XIII: México y sus amores.

Mexico era un Gran Premio diferente a los demás.

Los fans, el ambiente, las preparaciones y, sin duda, la euforia que se sentía por los mexicanos recibiendo a su piloto lo hacían un fin de semana especial.

El hijo del sol iluminaba al país con su llegada, México rugía por el piloto que les dio muchas alegrías durante años.

Ahora, sus cantos también cargaban el nombre de Max.

El cariño de los fans mexicanos envolvía a todos los pilotos, pero ahora con Max era una diferencia excepcional. Se sentía como si él también fuera un piloto de casa.

México amaba a quien amara a los suyos.

—¡Checo, Checo! ¡Max, Max! —La llegada al hotel fue una locura. Estaba todo rodeado por fans que coreaban los nombres de sus pilotos.

Dentro de la van, Max vio con asombro a los fans que alzaban carteles con frases de apoyo hacia su novio. Sintió una calidez en su corazón al darse cuenta de que también habían carteles para él.

—¿Siempre es así? —Sergio estaba tomando fotos de los fans con una enorme sonrisa. Se volteó a ver en dirección de Max y asintió—. Es impresionante... también hay fans míos.

—A mí no me sorprende. —Sergio, quien estaba grabando, movió su celular para enfocar a su novio—. Porque tenemos enfrente al futuro campeón de pilotos.

Max se rió ligeramente avergonzado.

—Basta... —Asegurándose de que la cámara los estuviera enfocando, Sergio se movió en los asientos y besó los labios de Max.

—Es nuestro primer Gran Premio de México juntos. —Max se vio en la pantalla de Sergio, su novio recostó su cabeza en su hombro mientras los grababa a ambos—. Tu primera vez siendo piloto de casa en México.

Max abrazó a Sergio.

—¿De verdad crees que me consideren así? —En ese momento, Sergio dejó de grabar y buscó entre sus aplicaciones.

—¡Claro que sí! Mira lo que dicen en Twitter. —Sergio le mostró a su novio las publicaciones a las que le había dado "me gusta" cuando entró a la aplicación esa mañana y desde días pasados.