Al día siguiente, Yoko se encontró con su madre en la cocina. Su madre parecía calmada y serena, pero Yoko sabía que debía tener cuidado.
⎯Yoko, hija, lo siento por lo que dije ayer⎯, dijo su madre, su voz suave y conciliadora.
⎯No quiero que estemos peleadas. Solo quiero lo mejor para ti⎯Yoko se sintió incómoda, pero intentó mantener la calma. ⎯Mamá, entiendo que no estés de acuerdo con mi relación, pero no puedes culparme de la muerte de papá⎯
Su madre suspiró y se sentó junto a Yoko. ⎯No quería decir eso, hija. Solo quiero que entiendas que la vida es difícil y que debes tomar decisiones que te protejan. Faye no es la mejor opción para ti⎯
Yoko se sintió confundida. ⎯¿Por qué dices eso, mamá? Faye me hace feliz⎯
Su madre sonrió y tomó la mano de Sofía. ⎯Hija, el amor es ciego. No ves los problemas que puede traer una relación como esa. La sociedad no acepta eso. Tu futuro será difícil⎯
Yoko comenzó a dudar. ¿Y si su madre tenía razón? ¿Y si estaba cometiendo un error al elegir a Faye, y las estaba sentenciando a las dos?
⎯¿Qué pasa si no puedo tener hijos?⎯
preguntó Yoko, su voz llena de inseguridad.Su madre asintió. ⎯Eso es exactamente lo que te estoy diciendo. Una relación como esa te limita. No puedes tener una familia normal⎯
Yoko se sintió mareada. Su madre estaba sembrando dudas en su mente y comenzaba a cuestionar su amor por Faye.
⎯Creo que necesito tiempo para pensar⎯, dijo Yoko, levantándose de la silla.
Su madre sonrió, satisfecha. ⎯Eso es todo lo que te pido, hija. Piensa en tu futuro y en lo que es mejor para ti⎯
Yoko se fue a su habitación, sintiéndose confundida y perdida. ¿Estaba haciendo lo correcto al elegir a Faye? ¿O estaba cometiendo un error que la haría sufrir en el futuro?
Yoko y Faye se encontraron en el parque, como habían planeado. Yoko intentó sonreír y actuar normal, pero Faye notó que algo estaba mal.
⎯¿Estás bien?⎯, preguntó Faye, preocupada.
Yoko asintió. ⎯Sí, estoy bien. Solo un poco cansada⎯
Faye la abrazó. ⎯Te creo. Pero si algo te preocupa, sabes que puedes hablar conmigo, ¿verdad?⎯
Yoko se sintió culpable por no contarle sobre la conversación con su madre, pero no quería preocupar a Faye.
⎯Sí, lo sé⎯, respondió Yoko, sonriendo débilmente.
Más tarde, mientras paseaban por la ciudad, se encontraron con un antiguo amigo de Yoko, era un chico guapo y carismático que siempre había tenido un interés romántico en Yoko.
⎯Yoko, ¡cuánto tiempo!⎯, exclamó su amigo, abrazándola.
Faye se sintió incómoda al ver la familiaridad entre Yoko y aquel amigo.
⎯¿Quién es?⎯, preguntó Faye, intentando sonar casual.
Yoko se rió. ⎯Es un amigo de la escuela⎯
sonrió. ⎯Yoko y yo fuimos muy cercanos en la escuela. ¿Recuerdas aquel viaje a la playa?⎯
Yoko se ruborizó. ⎯Sí, me acuerdo⎯
Faye se sintió celosa. No le gustaba ver aquella situación, si a Yoko sonreír, pero.. ¿reír con un chico? Que claramente pretendía algo más.
⎯¿Qué pasa?⎯, preguntó Faye, cuando el amigo de Yoko se despidió.
⎯Nada⎯, respondió Yoko. ⎯Solo un amigo de la escuela⎯
Faye la miró intensamente. ⎯Yoko, ¿hay algo que deba saber?⎯
Yoko se sintió nerviosa. ⎯No, Emma. No hay nada⎯
Faye no estaba convencida, pero no quiso presionar a Yoko. Sin embargo, la inseguridad y los celos comenzaron a crecer en su mente.
Faye y Yoko continuaron caminando, pero la atmósfera se había vuelto tensa. Faye no podía sacar de su mente la imagen de Yoko sonriendo y riendo con su "amigo".
⎯¿Cuánto tiempo hace que no veías a tu amigo?⎯, preguntó Faye, intentando sonar casual.
Yoko se encogió de hombros. ⎯No sé, un par de años⎯
Faye se detuvo y se volvió hacia Yoko. ⎯¿Y qué pasó entre ustedes en la escuela?⎯
Yoko se sintió incómoda. ⎯Nada, Faye. Solo éramos amigos⎯
Faye la miró intensamente. ⎯¿Estás segura?⎯
Yoko comenzó a sentirse frustrada. ⎯Sí, Emma. Estoy segura. ¿Por qué sigues preguntando?⎯
Faye se acercó a Yoko, su voz baja y intensa. ⎯Porque no me gusta ver cómo te mira. ¿No lo haz notado acaso? Como el te mira, se nota que pretende algo más que solo "amigos de la escuela"⎯
Yoko se sintió sorprendida por la reacción de Faye. ⎯Faye, no es nada. Solo un amigo⎯
Faye la tomó del brazo, su agarre firme, pero no fuere para lastimarla. ⎯No quiero que vuelvas a hablar con él. Y si lo harás no quiero que vuelvas a sonreír con él⎯
Yoko se sintió sorprendida por la posesividad de Faye. ⎯Faye, no puedes controlar con quién hablo⎯
Faye la miró con ojos ardientes. ⎯No con todos, pero con el no, Yoko, con el no⎯
Yoko se sintió asustada por la intensidad de Faye. No sabía qué hacer.
Aunque por otro lado, aquella reacción fue por la inseguridad de Faye, y sus ex relaciones. Tenía miedo a perder a Yoko, ni siquiera sabía cómo reaccionar.
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| Vientos que llevan tu nombre
Fanfiction¿La lejanía puede más que el amor? En dos mundos distintos donde el mundo se encarga de arruinar aquello llamado "amor"