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"Jobe my best friend"
Emma
— Hemos llegado Z — parqueo el auto frente a mí casa.
Me coloque mi abrigo antes de salir del auto ya que últimamente Sunderland estaba haciendo demasiado frío y la lluvias no ayudaban. Era principios de diciembre así que era entendible. Cargue a Zoe hasta dentro de casa y saque las compras que habíamos hecho antes de regresar a casa, además de todo lo que mi madre le había comprado en los últimos días, esa señora no tenía límite.
— Iré a arriba — aviso y subió con cuidado las escaleras.
— Vale, haré la comida — contestó.
Después de lavarme las manos organice todo en su lugar para despejar mi pobre cocina que la estaba hecha un desastre y con un poco de música me puse manos a la obra y preparar la comida, realmente no se me complicaba demasiado ya que eramos dos personas y una comía muy poco así que no era tarea difícil.
Media hora después ya estaba colocando los platos en la mesada y fui por Zoe arriba que jugaba con sus peluches, me tomó de la mano y la llevé hasta el baño de visitar para que pudiera lavarse las manos y así sentarla en su sillita.
— Mmmm rico mami — dijo tras probar la pasta.
Deje un beso en su mejilla y puse sus dibujitos en el ipad, a este punto de mi vida estaba muy acostumbrada a ver Bluey en mis almuerzos o cenas, y ese era un hábito que yo misma había implementado, cuando era solo yo hacía lo mismo comer viendo mi serie favorita en el salón de mi casa claro que hace tres años eso había cambiado y todo era sobre princesas, animalitos y ya no dramas, fiestas y relaciones amorosas.
No me quejaba de mi vida ahora porque ni siquiera me acordaba de como era antes, dramas, amistades falsas, un novio que era una maravilla pero terminó siendo un idiota, una madre controladora y un padre ausente, rumores falsos entre miles más de pesadillas que habían cambiado a pañales, biberones, ropa de bebe, noches sin dormir pero también me trajo la felicidad y paz que tanto había buscado, ser mamá de Zoe era lo más importante de mi vida y no lo cambiaría por nada del mundo.
Las fiestas, los bares, los chicos los había dejado un poco detrás pero no había desaparecido, sabía balancear mi vida entre ser mamá, la universidad, el trabajo y mi vida social y por ahora no me iba tan mal hasta que un moreno se apareció sin previo aviso haciéndome dar miles de vueltas.
Desde que Jobe había aparecido en nuestra vida las cosas estaban muy entretenidas, era tan descarado para coquetearme sin ser cuidadoso, me decía las cosas de frente y eso me ponía muy nerviosa, era un chico increíblemente atractivo, con un cuerpo que me sacaba un par de suspiros pero sobre todo su personalidad era la más atrayente, aún así no podía permitirme bajar la guardia porque primero estaba Zoe y después los demás y lo que menos quería es que ella saliera lastimada.
