Capítulo 6.

4K 208 5
                                    

Lunes. Por la mañana. Otra vez. Que alguien me mate ya. Después de la charla interminable que me dio mi hermano anoche lo único que quiero es dormir y dormir y dormir. Pero no, tengo que ir a clase, porque es el último año y tal y cual. Que sueño tengo joder. Si ya durante el día soy malhumorada, imagínate recién levantada. Bueno, recién recién tampoco, porque ya estoy de camino al instituto y harán unos tres cuartos de hora que estoy de pie y eso, pero no pasa nada. Eso es casi igual que estar recién levantada. Entro al edificio arrastrando los pies y veo a mi mejor amiga acercándose a mi. No tiene muy buena cara.


- Austin te busca. -Me dijo desganada.

- ¿Austin? ¿El de clase?

- Sí.

- ¿A mí para qué?

- Yo que sé, solo sé que te está buscando desde que llegó hace diez minutos.

- Pues que me busque, y ya cuando me encuentre que me diga la gilipollez que tenga para decirme.

- Parecía ansioso por verte.

- No digas tonterías Soph, no he hablado con él nunca, así que no puede estar ansioso por verme ni por nada que tenga que ver conmigo.

- Si tú lo dices...


Mi amiga seguía teniendo mala cara e íbamos caminando tranquilamente a clase en silencio. ¿Mi mejor amiga en silencio? Le tiene que haber sentado verdaderamente mal que Austin me estuviese buscando. Sé que le gusta, pero no es motivo para estar así tampoco. Quizá solo me busca para meterse conmigo, o porque quiere gritarme lo terrible compañera que soy. Sinceramente, dudo que deba preocuparse, ya que, Austin y yo, jamás, pero jamás, llegaremos a ser amigos. Porque no lo soporto, sé que no me he dado la oportunidad de conocerlo, pero no lo soporto. Llegamos a clase y ambas nos sentamos en nuestros respectivos asientos. Soph se pone a mirar por la ventana y yo me siento mal por ello. ¿Por qué mi amiga tiene que tomarse tan a pecho estas cosas?


- Hola... -Una voz a mis espaldas hace que de un respingo y me gire para encontrarme a un Austin muy sonriente.

- ¿Para qué me buscabas? -Dije seria.

- Para ver qué tal despertaste ayer, supongo que con una resaca terrible. -Dijo sonriendo. ¿Y este por qué sonríe tanto?

- No fue para tanto.

- Ya... -me miró confundido.

- ¿Eso era lo que querías decirme? ¿O es que querías reirte porque me viste completamente borracha? Suponiendo que me vieras, claro.

- Claro que te vi... ¿No te acuerdas de nada?

- Absolutamente de nada. Así que no pierdas el tiempo contándome todas las cosas bochornosas que hice, porque no me dará vergüenza ya que no me acuerdo. -Me miró dolido.

- Como quieras. -Volvió a poner su sonrisa arrogante, pero notaba su mirada mucho más fría que de costumbre.


Narra Austin.


¿Cómo mierda puede ser que no recuerde nada? Entiendo que iba tan borracha que parecía que le daría un ataque allí mismo, pero eso no justifica que ni si quiera recuerde que estuvo con alguien, cualquier mínimo detalle de que pasó tiempo conmigo. ¿Nada? ¿En serio que no recuerda nada? ¡Pues le voy a refrescar la memoria! Le agarré delicadamente pero con fuerza de la cara y le planté un beso rápidamente. Ella al principio lo correspondió pero de pronto se separó y me dio un guantazo.

Serás mía.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora