Estix #2 |Niall Horan.

9 'La misión'

Sin protestar hago lo que me dice y me dirijo a mi habitación, no sin antes mirarlo de nuevo, lleva puesto su traje Asgardiano, su capa roja vuela con el viento y recuerdo la noche en la que me cubrió con ella.

–Prometo que nada malo va a pasarte –suelta antes de correr hacia el Helicarrier.

¿Nada malo va a pasarme? ¿Qué quiso decir con eso? Sin importarme nada, llego a mi habitación y me encierro en ella, ahora puedo ver lo pequeña que se ha vuelto mi ventana, cuando quiero mirar hacia dónde va el jet, Fury no ha puesto una ventana que pueda abrirse sino más bien un cuadro de tamaño mediano que ahora se ve diminuto.

Me siento frustrada y comienzo a imaginar cosas. En todos mis pensamientos esta Loki y Niall siendo atacado por él.

Los minutos no quieren avanzar y mi miedo es cada vez más irracional. He tratado de abrir la puerta un par de veces, pero las palabras de Niall me hacen desistir.

Fuera no logro escuchar ni un sólo ruido, pasadas un par de horas me separo de la ventana, la luz de la luna hace que cada sombra de la habitación me aterre así que decido salir.

Las luces están apagadas, esto no es normal, no recuerdo haber visto la base a oscuras, camino a tientas y no puedo evitar tropezar un par de veces incluso con mis propios pies.

¿A dónde me dirijo? Me pregunto una vez que toco las escaleras, busco el móvil que me han dado e ilumino el camino hasta la planta de arriba. Toco un par de veces en la oficina de Fury pero no responde, incluso lo llamo pero no encuentro respuesta.

Sigo caminando hasta que me doy cuenta que estoy perdida. Maldición, ¿tiene todo que ser tan igual en esta base? Además ¿Por qué no hay nadie? Comienzo a sentirme asustada. Mi cuerpo esta temblando siento que alguien está detrás mío, pero al girarme no veo a nadie.

La sensación de asechamiento me incomoda, y decido buscar una pared para recargarme contra ella, sostengo mi pecho con fuerza y me deslizo lento hasta tocar el suelo.

Me siento débil, asustada y torpe por no hacer lo que me habían pedido. Escondo mi cabeza entre mis piernas e intento hacerme lo más pequeña que puedo. Un escalofrió recorre mi cuerpo, me estremezco al sentir una mano sobre mi hombro. Salto y miro a la persona que me toca.

– ¿Qué haces aquí? –pregunta y me mira con ternura, en su mano derecha tiene el Mjolnir apretado con fuerza. No puedo evitar saltar a sus brazos y colgarme de su cuello. Él me rodea la cintura con su brazos libre –Tranquila, Elizabeth. Estoy aquí.

Sus palabras me brindan la calma que necesito. Suspiro una vez que estoy hundida en su pecho. Niall comienza a acariciar mi cabello y a susurrar palabras de aliento.

¿Qué estoy haciendo? Me pregunto cuando han pasado un par de segundos y no me he separado de su cuerpo. Lo empujo con suavidad y me aparto de él.

– ¿Por qué no me obedeciste? –suelta herido, pero siento que no fue por no quedarme en mi habitación, sino por romper nuestro contacto.

–Estaba preocupada –murmuro y capturo mi labio inferior entre mis labios en un gesto nervioso.

– ¿Viste a alguien? –sé que me pregunta por Loki o Hel, yo niego con la cabeza, después de todo no estoy mintiéndole, no del todo.

– ¿Estás bien? –Pregunto por lo bajo, perdiendo mi poca dignidad.

–Lo estoy –mira a su alrededor y me hace un gesto para que lo siga.

Camino detrás de él, pero no se gira ni una sola vez para verme. Acelera su paso por lo que tengo que correr un par de veces, Niall se percata de eso y reduce su caminar.