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Maratón 3/4

Kenzie

Después de tres horas de viaje (otra vez) decidimos quedarnos en un Fiesta Inn. Mientras mis padres dormían nosotras venimos a la piscina.

-Creo que me voy a ahogar.-murmuró Tori viendo con pánico a la piscina

-Claro que no.-dije desde la piscina- Vamos, baja. Si yo que soy un hobbit puedo tú también.

Estamos en la piscina del hotel desde hace diez minutos, desde que llegamos Tori no quiere meterse.

-No. Yo me voy a quedar a broncear.-dijo poniéndose unos lentes de sol.

-Tori, ambas sabemos que si te intentas broncear acabarás rosa.- me burlé.- O vienes o te tiro.

-Quiero ver que lo intentes.- me miró divertida.

Salí de la piscina y ella se levantó, acto seguido corrí atrás de ella para alcanzarla. Como en cámara lenta nos resbalamos y caímos en la piscina.

Tori se tocó la cara en busca de algún daño y empezó a chillar.

-¡Me voy a ahogar! ¡Ayúdenme!

Algunos huéspedes nos miraban divertidos y algunos irritados. Amargados. Paso un chico realmente guapo y se metió a la piscina.

-Tori, por favor cállate. Chico lindo a las dos.-mascullé.

Contuvo el aire unos segundos y lo soltó. Pero que tierna se veía, toda una heart breaker profesional. Sí que sí.

Vi como él chico se acerco a la piscina.

-Victoria Gayle, dime que ves eso.-Susurré- ¿Tori?

Victoria

Volteé a ver a Kenzie, y estaba casi bizca viéndolo. Para ser sincera no estaba para nada mal. Alto, tampoco algo gigante que dijeras "!¿¡Qué mierda!? Es enorme". Tenía unos encantadores ojos verdes, que reflejaban un lindo carácter. Además una maldita y jodidamente perfecta sonrisa colgate. ¿Qué le podía hacer falta?

-Kenzie, sigamos actuado normal.-le dije- Ni cuenta nos hemos dado que nos le quedamos viendo como pez fuera del agua.

Tomé una pelota que traíamos, una de esas infables. La verdad es que me gustaba, tenía rayitas de diferentes colores.

Fui caminado a la orilla a recogerla.

-¡TORI!- gritó Mackenzie divertida.

-¿Qué mier...?-Fué lo último que pude decir.

Me hundí en el momento que mi pequeña hermana se me aventara de caballito, para que la cargara. Sólo escuchaba sus risas de morsa con epilepsia.

Me subí lo más rápido que pude para no morir ahogada.

No me había dado cuenta, pero éramos el centro de atención. Inclusive  para ese chico. Kenzie tenía un agarre en mi cuello con sus dos brazos, y con las piernas en la cadera.

-¡Kenzie! estas enferma, me asustaste.-Me reí- casi me ahogas.

-Hey hey hey, soy la niña pequeña de la casa. Quería que me cargaras-Tomo la pelota de mis manos- así que, ¡arreh caballito!

Empece a caminar por la piscina, esquivando gente. Mientras Kenzie reía como una niña pequeña; con una sonrisa como cuando nos compran Nutella.

-¡Vamos vamos vamos!-Gritó Kenzie- Más rápido caballo.

Me quede parada. Luego comencé a ir más rápido y reír con Kenzie.

Ni cuenta me había dado que el chico de escasa información, estaba del otro lado con otros chicos. Vaya, ¡que gran mierda! Estaba hecho una barrita de chocolate. ¿Entienden? POR QUE TIENE LOS CUADRITOS MARCADOS.

Empezamos a jugar con nuestra pelota, como cualquier persona normal. Ignorando un poco al chico.

-¡PELIROJA TEÑIDA A VER SI PUEDES CON ESTO!- le lancé la pelota a una altura que no alcanzara.-Rayos.

-¿Eso es todo lo que tienes, Gayle?-Kenzie aventó la pelota.

Mierda, qué digo mierda. Gran mierda.

La pelota voló hasta darle en la perfecta mejilla al chico guapo.

Mierda, gran mierda, jodida mierda.

Reinas del Drama.  #PGP2016  #Donawards2016 #STA #PAPD #PremiosSonamy2016Where stories live. Discover now