"Nadie en su sano juicio se enamoraría de alguien como yo..."

Te quiero.

Amy

-No me hagas reír -dice Dylan divertido.

-Pero me estás haciendo cosquillas -admite y levanto mi cabeza de encima de su pecho.

-No entiendo cómo -digo intentando no reírme.

-Con tu pelo -dice cogiendo un mechón rebelde- y también con tu respiración -dice riendo y ruedo los ojos.

-Entonces no te abrazo -digo mirándolo mal.

-No he dicho eso -dice con una sonrisa en los labios- No estoy acostumbrado a esto y me haces cosquillas, ¿qué quieres que te diga? -pregunta más para sí mismo.

-No sé -le sonrío levemente.

-Solo sé que quiero abrazarte -confiesa y me acerco de nuevo a su pecho. Le doy un leve beso en él y le abrazo como había estado haciendo hasta ahora.

Nos quedamos ambos en silencio y le abrazo, inconscientemente, más fuerte. Me encanta haber decidido quedarme aquí, con él. Quién me lo hubiera dicho a mi que meses más tarde estaría aquí, viviendo algo que muchas veces he llegado a imaginarme pero que ni en broma creía que algún día podían pasar realmente. Sé que tengo que tener una sonrisa de tonta en los labios que flipas pero en estos momentos no me importa. Supongo que no tengo miedo a lo que pueda pensar Dylan cuando ya conoce una parte bastante oscura de mi. 

Noto que su mano acaricia la mía y no puedo evitar que mi sonrisa se haga incluso más grande. Muevo levemente la cabeza hacia detrás para así poder mirarle; le pillo embobado mirando hacia nuestras manos y me muerdo el labio para no echarme reír. 

-¿Puedo preguntarte algo? -dice de la nada y me pongo nerviosa al notarle tan serio.

-Claro... -susurro.

Noto como su mano -que hasta ahora estaba entrelazada con la mía- se desliza a mi muñeca. Siento que se me viene el mundo encima.

-¿Cuando fue la última vez? -pregunta y sé que se refiere a los cortes. Suspiro intentando que así los nervios se vayan pero no lo consigo, intento pensar en qué puedo decirle y al fin y al cabo me doy cuenta de lo único que puedo decirle es la verdad porque eso es lo que yo querría que él hiciese conmigo, que fuera sincero.

-No llevo la cuenta -admito en apenas un susurro- Hará unos meses -le miro esperando que me mire- de hecho ni siquiera me conocías -digo y conecta su mirada con la mía- pero ya no he vuelto a hacerlo.

-¿Por qué? -pregunta curioso.

-Le prometí a Alison que lo dejaría y nunca he fallado una promesa -confieso y sonríe levemente. Acerca una de sus manos a mi mejilla y la acaricia con delicadeza sabiendo que tiene que ir con cuidado, que heridas ya tengo muchas. 

-¿Por qué? -vuelve a preguntar y frunzo el ceño al no entenderlo- Empezaste -dice aclarando las cosas.

-Tenía demasiadas cosas encima -confieso- y supongo que fue un cúmulo de cosas y sin darme cuenta ya estaba metida en todo esto -me mira seriamente- no sé -me muerdo el labio unos segundos- era la única forma que encontraba aceptable para seguir y que las cosas no dolieran tanto -cierro un segundo los ojos- sentía que todo iba mal y esa era la única forma de sentir que seguía viva a pesar de todo lo malo -abro los ojos y le miro- no sé cómo explicarme porque nunca he tenido que contárselo a nadie -asiente levemente- simplemente lo hice y me arrepiento -sonrío levemente- Supongo que mucha gente encuentra vías de escape mejores que esa pero yo no supe hacerlo -sigue acariciándome la mejilla y le sonrío.

-No volverás a hacerlo, ¿verdad? -pregunta y niego con la cabeza- Me lo prometes -dice y sé que no es ninguna pregunta pero aún así le saco de dudas.