Vuelve a casa.

34.1K 1.7K 132
                                    

Llevaba dos semanas y media viviendo en casa de Kevin, había encontrado algún trabajo de mesera, pero necesitaban tiempo completo, yo no lo tenía.
Tenía que ocuparme de mis estudios también.

Di vuelta al periódico que estaba leyendo en busca de algún anuncio.

No había nada.
¿que tan difícil era buscar un trabajo?

Bufé agotada y me quité las gafas.
Di un sorbo a mi cafe late y deje que el sabor lo de gustara mi boca. Dios mío, que estaba riquísimo.

Me acomodé en el sillón.
Nicholas no había llamado ni había hecho nada por buscarme, aunque me doliera admitirlo.

Lamentablemente las cosas no habían podido salir bien entre nosotros. De cualquier forma, lo que pudo haber sucedido no era normal, no estaba permitido y estaba fuera de nuestras manos.

Me dolía mi pecho y sentía angustia tan solo de pensar en él.
En su rostro, en su cuerpo. En sus besos...

Kevin había sido muy bueno al permitirme vivir con él, no tenía a nadie y no tenía a donde ir, regresar con mis padres, fracasada no era una opción. Mi padre estaba en banca rota y habían perdido casi la mayoría de sus bienes, porque eran de ellos, yo no quería nada.

----------

Cuando me desperté Kevin dormía al lado mío. Lo primero que cruzó por mi mente fue que quizá tuvimos sexo, pero no, eso era algo imposible de que pasara.

Moví su brazo intentando despertarlo, faltaba media hora para las siete de la mañana y Kevin tenía deberes que cumplir.

-Despierta dormilón.
Susurré suavemente en su oído.

Gruñó y abrió sus ojos, lo suficiente como para verme y poder darme una sonrisa tímida.

-Deseo despertar así todos los días. -dijo con voz mañanera.

Fruncí mi ceño.
-¿Así como?

-Quiero que tu rostro sea lo primero que vea durante las mañanas.

Asentí nerviosa pero no respondí.

-¿Encontraste algo ayer? -se refería al asunto del trabajo, supongo que debió ver los cientos de periódicos esparcidos por la sala.

Hice una mueca
-No, lamentó el desastre que dejé, no he encontrado nada aun. -suspiré-jamás pensé que fuese tan difícil.

-No te des por vencida, sabes perfectamente que el puesto para ser mi secretaria personal siempre va a ser tuyo.

Me quedé pensando un momento. Si analizaba esto, tendría un trabajo y así podía pagar el alquiler.

Kevin me miró sin entender.

-Acepto-dije sonriendo.

-¡Por fin! -alzo sus manos hacia el cielo, dramatizando.

-Sabia que terminarías accediendo.

Le di un golpe en su hombro, jugando.

-Entonces puedes comenzar mañana. -dijo determinante y serio.

-Mañana a primera hora estaré ahí, jefe -dije bromeando e hice un saludo de general, colocando mi mano sobre mi frente y bajándole con determinación.

-Así será señorita. -contesto de la misma forma.

Ambos reímos.

********
Cuando desperté estaba entusiasmada, por fin sabría lo que es tener una responsabilidad y un trabajo, algo que jamás había hecho en mi vida.

Can't have you.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora