Especímenes raros.

sesenta y tres.

A Dan no le gustaba despedirse de la gente y no especialmente de su dulce niño que aquel día lluvioso de Agosto marchaba para Nueva York a desempacar para no ajetrearse con la Universidad. Dan no podía acompañarlo porque él empezaba clases antes así que se sentía impotente de no poder hacer nada mientras el chiquillo le daba un beso en la mejilla y se volvía a colocar bien los lentes, que volvía a utilizar después de mucho tiempo.

"Te quiero mucho, Dan".

Dan asintió, robándole un pico que terminó en un contacto más profundo y con unas mejillas ruborizadas en cuando se dieron cuenta que eran el centro de atención.

"Yo también, niño raro, más que al tenis, ¿recuerdas? Te veré la próxima semana bebé, que te vaya bien" lo despidió con un fuerte abrazo que fue correspondido. "Si no estás cansado, llámame, o mejor en la mañana para que no te quite tiempo, es una promesa, ¿ok?" Elijah asintió, sonriendo plenamente.

A Dan se le partió el corazón cuando vio a la pequeña figura de Elijah subir al avión pero trató de sentirse bien cuando aquella dulce voz cantarina lo llamaba pese a la diferencia de horario, hablando de cosas que ni al caso, que su compañero de cuarto tenía una novia y era muy amable con él, que las duchas si tenían agua caliente, que había una cafetera, que había galletas como aperitivo de medianoche, que el clima funcionaba y que la cama era suave y era matrimonial lo justo para tenerlo a su lado; Elijah habló hasta que se quedó dormido hablando por teléfono y entonces Dan sonrió, musitando un: "buenas noches, pequeñín".

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N/A: Ay ;-;

Les tengo una pregunta, ¿alguno de uds. cumple en Septiembre-Octubre?

Todo el amor '･ᴗ･'♡