Survival en el Área #1 (Newt y Ariel)

Capitulo 17

Ayer hizo calor, ahora es más sofocante y sudoroso. En todo el día los habitantes me alabaron por traer nuevamente el agua al Área, si no moriríamos, en días así, en el que el agua nos ha ayudado a mantenernos cuerdos. Quizás sea por la Llamarada, un rastro de ella está aquí, acalorándonos de una manera exagerada.

Alby, que ya se ha curado de una manera rápida y que ha vuelto al mando, ha dicho que mejor no hagamos nada por hoy, ya que nadie ha podido trabajar bien con este calor, menos él. A muchos les pareció genial, y a otros, raro, por el comportamiento tan protector de Alby que ha extrañado a unos pocos.

Yo, sentada en el tronco, junto con mis amigos, debajo de una sombra que emite un gran árbol que nos protege del sol, hace que estemos más frescos. Veo que Thomas, Gally y Minho hablan con mi hermano, creo que se han hecho amigos, eso es bueno. Teresa está dibujando en la arena con un palo acompañada de Shuck que está sentado junto a ella, en la arena, mientras dibuja con ella. Mientras que yo reviso mi pantalla, buscando algo que mi amiga puede dejar por ahí escondido.

- ¿Qué tal larchos? –pregunta Newt, apareciendo de la nada, caminando hacia nosotros, con una sonrisa pintada.

¿Por qué está tan feliz?

Cuando veo que saluda a los chicos y se sienta junto a ellos, con esa sonrisa, lo primero que se me pasa por la mente es el beso de anoche que él me dio, cuando me confesó que le gustaba. Muevo la cabeza para no pensar más en eso, no quiero sonreír tontamente mientras me pongo roja. Veo a mi derecha que él está sentado un poco lejos de mí, conversando abiertamente con los chicos.

Después de que él me diera el beso, ayer, le dije que no sabía sí lo amaba o no, luego él me contestó que sí yo no sentía nada por él, él me enamoraría todos los días si es necesario, hasta no poder vivir sin él. Sonrío al recordar aquellas palabras. Creí que no era así, pero lo es, yo creo que ni siquiera se da cuenta de lo que dice, pero por lo que hizo ayer, estaba muy seguro de sí mismo.

Pero sin darme cuenta, Newt me ha pillado desprevenida, sus ojos juegan a las miradas con los míos que siguen intactos en él. Me da una sonrisa juguetona y vuelve su concentración hacia los chicos que hablan sin parar. Miro mi pantalla algo avergonzada por algo que no sé.

- Ariel.

Miro donde proviene la vos que me llama, cuando noto que los chicos me miran con una risa tonta, especialmente Newt; él se apoya en sus piernas con sus codos.

- ¿Qué quieres hermano?-le pregunto, fingiendo estar seria.

- Ya que estás rodeada de chicos tan guapos como yo ¿Hay alguien que te gusta, hermana? –pregunta.

Yo me quedo inmóvil ante la pregunta, mientras veo las miradas de estos larchos que me ponen nerviosa. Trago saliva al ver de reojo a Newt que espera mi respuesta como a todos. Aclaro mi garganta torpemente y decido hablar fríamente.

- ¿Por qué lo preguntas? ¿Para ponerte celoso? ¿Para darle un golpe en la cara al supuesto chico? ¿Para hacerte el fuerte? ¿Para tener el trabajo del hermano protector? –le pregunto, para dejarlo en ridículo.

Él me mira desafiante, como un juego, como siempre lo habíamos hecho, manteniendo el silencio mientras que estos larchos se ríen por dentro.

- Solo era curiosidad, Ariel. Creí que te gustaba a alguien. Ya que tienes la edad suficiente para enamorarte y...

- Ya no me interesa enamorarme, solo es desconcentración y una estupidez, nada más. No me gusta nadie –respondo seriamente, aunque de una manera estúpida.

- No me lo creo –corrobora Hank, con una sonrisa larga.

- Ni tú te lo crees, Ariel –se burla Gally.

- Son puras palabras mierteras –agrega Minho.

- Bueno, eso es asunto mío, no de ustedes –digo tontamente, tartamudeando cuando escucho la risa de Newt.

Hubo un silencio algo extraño, como si el tiempo se hubiera detenido por completo. Yo los quedo mirando (Como de...WTF) pero ellos no me toman a tención, otra vez.

- ¡Entonces adivinemos a quien le gusta esta larcha! –sugiere Thomas, chasqueando los dedos-. Empecemos con Jeff.

Todos le quedan mirando, tornando ese silencio perturbador, otra vez como si el tiempo se hubiera detenido. Minho niega con la cabeza, al igual que Gally, con mucha seguridad.

- ¡Qué no me gusta nadie! –grito.

Pero nadie me toma en cuenta, ya es demasiado tarde para cambiar el tema. Vuelve ese silencio pensativo en la que están estos garlopos.

- Estoy seguro que no es Jeff, no creo que sea de su gusto –agrega Newt algo serio, luego vuelve esa sonrisa-. ¿Será, Zart?

- Estos larchos mierteros -susurro.

- No creo –responde Hank-. ¿Serás tú, Gally?

Veo que él mismo niega con la cabeza.

Estos larchos estuvieron como media hora tratando de adivinar quién me gusta, sí ni siquiera sé quien me gusta. Nombran a garlopos que no he hablado con ellos, ni he tenido el placer de conocerlos a todos. Hasta incluso nombraron a Shuck solo para molestarlo.

- ¿Serás tú, Newt? –habla Minho.

Todo mi cuerpo reacciona de inmediato al escuchar ese nombre. Miro de reojo a los chicos y noto que de pronto Newt se pone algo nervioso mientras que yo me pongo algo tensa.

- No lo sé ¿Por qué no le preguntamos a ella? –sugiere Newt, con una voz temblorosa.

Él me mira, al igual que todos, me siento observada y atrapada a la vez. ¿Qué está pasando? Me siento pequeña como una hormiga por la presión que me están proponiendo estos larchos.

- Hermana ¿el chico que te gusta, es Newt?

Abro la boca para negar lo dicho, pero no me sale nada, nada de voz, ni una sola palabra, no sé qué decir en estos momentos. Ni yo sé la respuesta a ello. ¿Me gusta Newt? ¿O no?

- Yo...-hasta ahí llegó mi respuesta ¿Qué digo?

- Hermana, hemos nombrado a cada uno de los habitantes y no has reaccionado como lo has hecho cuando nombramos a Newt –agrega Hank-. Entonces eso significa que...

- Si me gusta –respondo mirando el suelo. ¿Qué? ¿De verdad dije eso? ¿Acaso realmente me gusta? ¿Y no lo sabía?

Noto que todos se quedan callados. Luego de unos torturantes segundos, todos sueltan unas carcajadas ruidosas que me hacen saltar. Los miro sorprendida y confundida ante sus comportamientos tan repentinos. Menos Newt, que él me mira sorprendido ante mi respuesta, sus ojos están intactos en los míos.

- ¿Qué sucede? –les pregunto.

- Sucede que ya lo sabíamos, solo esperábamos que lo dijeras tú y no otro larcho miertero –responde mi hermano, mientras sigue riendo como todos.

- ¿Qué? –chillo. Me levanto de golpe mientras los miro algo humillada en frente de Newt.

- ¡Son unos larchos mierteros! ¡Me voy!

Escucho que las risas son más fuertes detrás de mí. Me voy caminando, enojada hacia el mirador. ¿Cómo pudieron hacerme eso enfrente de él? Qué vergüenza. Estos larchos me lo van a pagar. La venganza está por llegar al Área.