7

106 15 1
                                    

A la mañana siguiente, Ágata no estaba en sus mejores momentos, se arrepentía de lo que había echo la noche anterior, lo había pasado bien, pero se arrepentía. Mucho. Seguía siendo incapaz de sacarse a Levi de la cabeza, pero hizo de tripas corazón y fue a hablar con su tía.

Se merecia una disculpa.

Aquel día habían salido fuera de los muros junto con Eren, llegarían en un par de horas así que fue a darle una pequeña visita a Fum, el cual se encontraba intranquilo, algo inusual en el. Ágata empiezo a preocuparse, Fum era de por si un caballo tranquilo, se podía decir que era un cacho de pan pero aquel día corcoveaba dentro de su cuadra e incluso llego a darle patadas a la puerta. Ágata no sabia que le pasaba y por lo tanto no podía calmarlo, cada vez que intentaba acariciarlo se apartaba bruscamente. Escucho ruidos de cascos, eran las tropas.

Desde un primer momento Ágata sabia que algo no iba bien, lo supo desde que vio la cara demacrada de Levi, habían perdido un montón de soldados. Eren se encontraba tumbado en uno de los carros, acompañado por Mikasa. Se le rompió el alma al ver que, el caballo de Petra, no tenia jinete. Cayo de rodillas al suelo, las lagrimas caían silenciosas por sus mejillas. No tubo oportunidad de disculparse, y no la tendría.

Se tapo el rostro con las manos, ocultando el dolor que sentía, el mismo dolor que sitio cuando murió Mina, unos pasos firmes se acercaron a ella, deteniéndose a escasos metros. No sabia quien era y no le importaba.

- Ágata - Levi le agarro de las muñecas forzandola a apartar las manos, obligándola a mirarla. Lo vio con lagrimas en los ojos, tenia una venda en el pie. Se puso de pie lentamente mirando para el suelo. Hacia mucho que no lloraba de esa manera, lo vio a los ojos y, simplemente, lo abrazo. Habían pasado muchas cosas, y necesitaba mucho un abrazo. Levi le correspondido acariciando el cabello y besando su frente.

- ¡Levi.... yo lo siento, lo s-siento mucho! - le abrazo con mas fuerza, el no se quejo.

- No pasa nada, Ágata, tranquila - la muchacha sollozaba pegada a su pecho.


Cuando llego a su habitación Ágata abrió el grifo de la ducha, dejando correr el agua, se metió cuando estaba caliente y fue bajando la temperatura hasta que estuvo completamente fría. El sentimiento de odio hacia si misma aumento, el puñetazo que le dio a la pared hizo que los nudillos sangrasen, pero no le importo.

Al salir del cuarto de baño se envolvió la mano derecha aun sangrante en un pañuelo y apretó, se sentó en la cama y lloro, lloro hasta que no pudo mas.

 Attack on Titan {Fanfic}Where stories live. Discover now