La Motociclista - |CAMREN| FanFic

Capítulo 49

La motociclista.

Narra Lauren.

— ¡Debes de parar con toda esta mierda, ya! —Me grita mi padre.

Lleva toda la maldita mañana con sermones de mil palabras ya que se entero que salí con Camila ayer. Definitivamente es molestoso, creo que tengo que empezar a conseguir un departamento. o pagaría con lo que tengo de la herencia de mi abuela, pero no podría hacerle eso a mis hermanos, no quiero que me odien.

— Papá,  a ella no le pasara nada, ¿Vale? — Enciendo la televisión y me acuesto en la cama.

No entiendo porque cree que le haré daño, jamás dañaría a Camila, y eso es algo de lo cual estoy completamente segura, como nunca en mi vida lo he estado.

— Es que no lo entiendes..—Lo miro fijamente esperando lo que tiene que decir.—No me preocupa ella ¡Me preocupas tú!—Grita mirándome.— Alejandro es peligroso y puede...

Lo miro como si fuera mi enemigo, él mas que nada sabe perfectamente porque lo trato así.

— No te atrevas a mencionarla.—Lo señalo furiosa.— Sabes muy bien que esto es por Alexa, y que tarde o temprano se hará justicia.—Me levanto molesta.

El me queda viendo y respira profundamente.

— Está bien, Lauren, es tú vida, son tus decisiones y puedes hacer lo que se te venga en gana, yo ya no te diré nada, solo... No involucres a Chirs y Taylor en esto.—Me mira molesto y sale de la habitación.

¿Por qué todo tiene que ser tan difícil? 

Tomo una almohada y la golpeo contra la cama fuertemente, necesito desahogarme y sacar toda esta furia de mi ser. Tomo las llaves de la moto y salgo de la casa, enciendo él motor y antes de ponerme el casco veo a Taylor llegando de la escuela me mira fríamente y entra a casa, puedo jurar que sentí que me congele de frialdad.

Conduje hasta motrix en donde había una habitación de boxeo, aparco la moto en él lugar y entro, abro la puerta y saco unos guantes, antes de hacerme una cola de caballo en él cabello, tomo los guantes y empiezo a golpear él saco fuertemente, grito y maldigo a mi antojo, después de varios minutos me tranquilizo y me siento en un banco, pueden existir  miles de formas para tranquilizarme, probablemente si Ally estuviera aquí, ya me hubiera llevado a la misa, para que así me echen agua bendita y calmarme, no la veo desde sexto grado.

Salgo del lugar y me doy cuenta de que esta lloviendo, manejar así en moto seria la muerte segura, así que llamo a Lucy para que así pase a recogerme en su auto.

Le marco y contesta.

—Bueno? —Contesta riendo.

—Hey, ¿Donde andas?—Pregunto alzando un poco la voz, parece que mi amiga se encuentra de joda.

—En casa de Cece.—Responde

—¿Crees que puedas venir a recogerme, estoy en motrix..—Le hablo calmadamente.

—Tienes suerte de que no este borracha..—Puedo oír que ríe.—Ya voy a por ti, Lo. —Me dice y cuelga la llamada.

Guardo mi celular y me arrecuesto en la pared del local, son las diez de la noche, un miércoles en él cual yo debería de estar estudiando para la universidad, creo que he descuidado mi vida. Nunca me he animado por estudiar, toda mi vida se echo a perder.

Recuerdo la vez en que Chirs llego borracho a casa una noche y papá no se dio cuenta ya que yo lo metí a mi cama y pensó que era yo, ese fue mi primer acto de buena persona. Pero que digo, ¡Soy buena persona!

He llegado a pensar en que debería de dejar de ser tan estúpida y olvidar por completo la estúpida promesa que le hice a Lex, pero cuando estas y sientes que estas comprometida con algo y sientes que lo tienes que cumplir tu yo interior manda y te hace la persona más ciega jamas conocida. Es como cuando  te enamoras digo, todo mundo tiene que pasar por eso, desde él crush de escuela hasta conocer él amor verdadero, y si en busca de este sufres, pues felicidades, ya sabes lo que es él amor.

Muchos dicen que hay que sufrir para que verdaderamente sepamos lo duro que puede ser la vida, esto esta lleno de sorpresas, experimenta, no sabes cuando pueda terminar.

Y supongo que eso es lo que me ha tocado vivir.

*Narra Camila

Llegue temprano a casa, Felipe estaba esperando afuera del colegio así que no pude ir con Sandra a el centro comercial, y es que ya es viernes y necesito hacer mis compras de ropa deportiva, y tengo que comprar unos nuevos pares de medias.

— Camila, ven un momento por favor. —  Oigo a mi madre, esta situación se parece tanto a cuando te llaman para dar alguna lección en el colegio, la cual no te sabes ni mierda.

Salgo de habitación casi cayéndome ya que me estaba terminando de cambia.

—Hola, ¿ocurre algo? —  Pregunto tomando asiento alado de ella.

Se ve calmada y de buen humor, eso es buena señal, no hay que temer. Mi respiración se normaliza y me quedo esperando a que ella hable. 

— Me he enterado sobre tus clases de guitarra. — Mierda.

Cuando tu madre esta calmada no te tranquilices, es cuando más miedo debes de tener.

— Yo.... Puedo explicarlo de verdad...

Ella niega y me hace callar suavemente.

— Esta bien, se que he sido injusta, y se que lo no lo hiciste con mala intención. —  Dice mientras se saca los lentes. —  He hablado con una amiga, ella es profesora en una de las academias de música aquí en Miami y es muy buena. — Me cuenta y yo la miro asombrada. 

Esperen, eso quier decir que ya no tendré que ver a Lauren?

— Pero yo tengo una tutora mamá...Y es muy buen en realidad. — Para nada lo dije en mal sentido.

Mi madre me miro y dejo escapar un buen suspiro, no entiendo la actitud que está tomando, es como si estuviera cambiando.

—Esta bien, dejaremos que ella te enseñe lo básico, y en unos meses estudiaras en la academia. —  Propone y asiento alegre.

— Gracias. —  Digo para después darle un abrazo, de esos que has estado esperando desde hace mucho, ese necesitado.  

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Espero y estén disfrutando su fin semana babes <3.