Lost Moments

Después de la Batalla

"Si no sobrevivo... quiero que recuerdes que te amo más que al quidditch"

"La mayoría de las chicas se ponen celosas de cualquier tipa que creen que es más bonita que ella, pero yo solamente debo decuidarme de tu escoba"

¿Qué pasa cuando los peores temores se hacen realidad y uno de los dos no vuelve?

._.

Oliver me dedica una mirada triste.

-Si no sobrevivo -traga saliva antes de continuar-. Quiero que recuerdes que te amo más que al quidditch.

Trato de sonreír mientras le acaricio la mejilla.

-Nunca dejarás de pensar en el quidditch, ¿verdad? -pregunto con un enfado fingido, me tiembla todo el cuerpo y solamente su presencia evita que me eche a llorar-. Estamos a punto de iniciar la guerra contra Vol... Voldemort y lo sigues mencionando. La mayoría de las chicas se ponen celosas de cualquier tipa que creen que es más bonita que ella, pero yo solamente debo de cuidarme de tu escoba.

Él me sonríe levemente.

-Pero me quieres como soy.

-Sí -musito despacio-. Pero va más allá, Oliver. Yo te amo.

Jadea al mismo tiempo que sus brazos rodean mi cuerpo.

-Yo también te amo, Katie.

Y eso es todo lo que necesito escuchar antes de que la oscuridad nos rodee.

._.

Cuando abro los ojos me doy cuenta de que todo fue un sueño, como siempre. Giro un poco para acomodarme mejor en la cama pero sé que no podré volver a dormirme, cierro los ojos para imaginarme los suyos, pero la realidad me golpea antes de que pueda poner mis defensas en pie.

Está muerto y nunca volverá a besarme, abrazarme, mirarme o, simplemente, hablar conmigo sobre el quidditch. Las lágrimas corren por mis mejillas sin que pueda detenerlas y no quiero, estoy sola en la pequeña casa que compramos entre los dos antes de la Batalla así que no me preocupa el que alguien entre y me escuche o vea, por lo que me hago un ovillo en mi cama y lloro mientras el dolor me inunda, llena y domina. Esa es mi rutina todas las mañanas desde que murió hace ya más de dos meses y lo peor es que no creo que llegue a cambiar en mucho tiempo.

._.

-Debes dejar de autodestruirte, Katie, a Oliver no le gustaría verte así -Leanne me dedica una mirada cariñosa.

-No estoy autodestruyéndome -replico con una mueca de fastidio.

Ella se limita a suspirar profundamente por mi mentira tan obvia y la imito, ni siquiera yo, que soy quien se la repite todo el tiempo, he podido creérmela.

-Estoy intentándolo, de verdad -añado un momento después, triste.

-Lo sé, Katie, yo mejor que nadie lo he visto, pero no pones todo tu empeño. Sí, se fue, pero no puedes dejar que tu vida termine, debes continuar.

-No puedo estar con nadie más -digo, desviando la mirada a una foto en la que aparecemos los dos, abrazados y sonriendo en Hogsmeade, el día en que, oficialmente, comenzamos a salir.

-No te estoy pidiendo que salgas con otra persona, Bell -dice repentinamente enojada-. Yo...

-Wood -la interrumpo antes de que me sermoneé-. Recuerda que nos casamos como una semana antes de la Batalla -las lágrimas amenazan con salir de mis ojos nuevamente, ese día había sido perfecto: una ceremonia sencilla, con nuestras familias y nosotros, locamente enamorados, un futuro brillante por delante, con unas carreras prometedoras en el quidditch.