El Dolor De La Soledad |Neji Hyūga|

🔥Capítulo 19🔥

Entré al armario con Naruto. ¿Porqué me tenía que tocar con él? No me llevo mal ni nada por el estilo, todo lo contrario, me parece un buen chico.

Nos sentamos y empezamos a hablar, no era para nada incómodo, ya que solo somos amigos, nada más. Además, nunca le quitaría el novio a una amiga, a Hinata, en este caso.

Aunque no quiera admitirlo, me gusta Neji, si, me gusta Neji Hyūga.

-¿Porqué habéis venido, Naruto?

-Pues, porque... queríamos veros.

-No. Esa excusa ya no me sirve, Naruto. Necesito la verdad, y se que tu me la vas a dar, ¿verdad que si?

-Pero, es que... no puedo.

-Bien, pues hasta que me lo digas, no te pienso hablar.

-¡QUÉ! ¡NO MEI, POR FAVOR, NO ME HAGAS ESTO! -empezó a gritar -¡MEI! ¡HABLAME!

Estuvo así como veinte minutos hasta que accedió a decírmelo.

-Bien. Tu ganas, te lo dire. Pero, por favor, hablame.

-Pues cuéntamelo. TODO.

-Vale. Hoy, por la tarde, cuando nos dijisteis que ibais a montar una fiesta por la noche, os oímos después decir que la ibais a hacer en tu casa, entonces, Shikamaru y todos decidimos hacer un plan para poder espiaros, y así lo hicimos. -fruncí el ceño, algo molesta -Quedamos por la noche a las nueve en el parque, donde nos encontramos con Kankuro, quién después vino con nosotros a espiaros porque no tenía nada mejor que hacer. Nos pusimos enfrente de tu balcón y os oímos decir quien le gustaba a quien, después de media hora de asombro por parte de todos nosotros, vinimos a picaros para poder entrar y así jugar a la botella con vosotras para especificar si era verdad o no que ibais a por nosotros, pero ya veo que no nos está funcionando muy bien el plan. Y creo que no me he olvidado nada. Esa es toda la historia con detalles y todo.

Me quedé asombrada, me acababa de decir todo, absolutamente todo. Pensé que no me iba a decir nada, pero, no es así, él con tal de no perder una amiga hace lo que sea.

-Naruto... si esa historia que me has dicho, es cierto... no se lo que vamos a hacer. -dije con la mano en la cabeza.

-Ah, pero que creo que a los chicos también le gustáis vosotras. Cuando os oímos deciroslo se quedaron un buen rato enbobados.

-¿Tú crees? -dije esperanzada -Osea... ¿estás seguro, Naruto?

-Creo que sí. No me lo han dicho, pero yo creo que sí.

-¿Y me podrías hacer un favor?

-¿Cuál?

-¿Lo podrías averiguar?

-Haré lo que pueda, Mei, te lo prometo.

-Gracias, Naruto.

-Ah, ¿y tú me puedes hacer otro pequeño favor?

-Si, claro, ¿cuál?

-Entregale esto a Hinata, de mi parte, por favor. Se las iba a entregar a Sakura, pero he decidido que es mejor luchar por Hinata.

Me tendió un ramo de rosas con una cartita, no sé de donde demonios habrá sacado este hombre un ramo de rosas, no se las he visto en toda la noche.

-Claro que si, Naruto, has hecho lo correcto. -dije cogiéndolo.

-Eh, vosotros, ya ha pasado la media hora. -dijo Neji despreocupado.

Salimos del armario, yo con el ramo de rosas en mano, todos se nos quedaron mirando. Neji frunció el ceño, se levantó y se fue de mi casa.