Poema 2

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Resulté ser un chico tóxico en su vida,
le marqué la piel con la pasión de mis huellas dactilares,
le dejé un hueco horrible en su pecho izquierdo;
yo fui más de sujetarme de sus ramas,
ella de abrazarme las raíces.
Mis cimientos no podían soportar el peso de mis inseguridades,
a ninguna chica le gustaría estar con alguien que es demasiado inseguro
de sí mismo
y del mundo;
a ninguna le gustaría estar con alguien que, más que superar miedos,
cada día es un reto, una lucha constante que enfrenta con tanto demonio
en su cabeza
y también fuera de ella.
Resulté ser un chico sin antídoto,
nunca supe curarle ninguna herida,
pero juro que mientras lamía cada una de ellas
recordaba lo bonito que era verle sonreír
mientras se acomodaba el pelo en su oreja
y pensaba cómo a una chica como ella
le pudieron hacer daño.
¿Quién querría quitarle el atardecer a los días?
¿Quién querría quitarle la sonrisa a ella?
Resulté ser un chico de roturas,
esta vez fui yo quien partió.


Mientras tanto...-(poemas)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora