La apuesta...(Mario Ruiz)

Capitulo 9. Cariño, no dejare que nadie te haga daño.

~Lucia~

Decirle la verdad...

Esas palabras resonaban en mi cabeza. Las palabras que dijo Nicolas cuando vino esta mañana.

Decidi preguntarle a Mario sobre que verdad hablaba pero el se limito a decir que no sabia de que hablaba.

Seguimos viendo peliculas hasta que mi celular comenzo a sonar en mi bolsillo del short.

Numero desconocido...

-Diga...¿que mierda quieres?...no,no voy a regresar...vete a la mierda

Colgue la llamada, algo frustada. ¿Como mierda consiguio mi numero? Me pare de la cama de Mario y me fui a encerrar a mi habitacion a llorar hasta quedarme sin lagrimas.

~Mario~

Lucia habia recibido una llamada.

-Vete a la mierda- fue lo ultimo que dijo antes de colgar e irse a su cuarto.

Me pare y fui a su habitacion pero estaba cerrado con seguro. Llame a la puerta varias veces, pero no hubo respuesta alguna.

Me estaba preocupando. Se hizo mas tarde y no abria la maldita puerta.

Baje a la cocina donde segun me dijo estaban unas llaves de repuesto de cada puerta por si se cerraba "por accidente".

¿Por que no pensaste antes?

Tome varios llaveros y subi a donde esta su habitacion.

Intente con una, no. Otra, tampoco. La tercera. ¡Se abrio!

Entre con temor a encontrarla tirada o ver una escena tragica. Camine hasta el baño de su habitacion y estaba cerrada tambien. Toque la puerta y se abrio segundos despues.

Al entrar al baño encontre a una Lucia con los ojos rojos de tanto llorar, el maquillaje corrido, los nudillos llenos de sangre.

-Tus nudillos- dije algo inseguro. No sabia que diablos habia hecho. Lucia solo señalo una pared del baño. Estaba un poco estrellada y manchada.- ¿Que paso?- seguia inseguro.

-Un ataque de ira- contesto restandole importancia- o tal vez un idiota me trajo malos recuerdos y me senti impotente.- dijo mientras se le cortaba la voz.

Llorar de nuevo, no

-¿Fue por la llamada?- pregunte. Queria sonar preocupado pero creo que sono en un tono burlon.

Luci, por su parte asintio con la cabeza y despues se hecho a llorar, con la mirada al suelo y la cabeza agachada.

Levante su cabeza tomandola de la barbilla, la mire a los ojos.

-Cariño, no dejare que nadie te haga daño.- deje de hablar pues no habia mas que decir. La sente en la taza del baño y saque el botiquin de ataras de su espejo.

Cure sus heridas y las vende. No sabia que hacer. Y pues, crei que eso seria lo mejor.

-Ven- la puse de pie y me dirigi a su cama. La ayude a recostarse para que se duermiera.- Cariño, descansa- le di un beso en la mejilla y estaba dispuesto a irme a mi habitacion pero me detuvo.

-Mario- voltee a verla- ¿Te quedas conmigo?- eso no se pregunta en estos momentos.

Regrese al borde de su cama. Me quite los tenis, el pantalon y la playera quedandome en boxers. La cara de sorprendida de Lucia no tardo en aparecer, yo solo sonrei y me meti a las cobijas con ella.