Ángeles en la tierra

2.6K 283 23
                                    

Se quedaron conmigo todo el tiempo. Más tarde hasta dejaron que entraran también Niall y Liam. No sé cómo lo lograron, usualmente no dejan que esté tanta gente en una habitación de visita y menos todo el día, pero algunos boletos y autógrafos lograban maravillas. Incluso dejaron que Ed llevara su guitarra y tocara algunas canciones.

 Al anochecer Liam, y Niall se despidieron. Ambos verían a sus familias antes de reunirnos de nuevo en dos semanas. Ed también se retiró con la promesa de volver al siguiente día.

 Al pasar las horas, el hospital se quedó en un silencio que lo cubría todo. No sabía qué hora era, pero los pasillos se veían vacíos. Estaba cansada de estar acostada. Tenía miedo de cerrar los ojos, cada vez que lo hacía recordaba vívidamente lo que había sentido al quedar atrapada bajo el peso de Paul sobre mi cuerpo. Las heridas me dolían, pero más que todo, no soportaba estar rumiando en mi mente la incertidumbre de mis circunstancias, necesitaba distraerme o enloquecería.

Tenía miedo del exterior pero al mismo tiempo, lo que más deseaba era salir y sentirme un poco menos cautiva.
 Me puse de pie con cuidado y me dirigí a la puerta. Vacilante miré al pequeño sillón en el que se habían quedado dormidos los chicos. Louis estaba medio sentado y Harry recostado con la cabeza en su pecho y el brazo rodeando su cintura. Esa imagen, ese amor profundo no tardó en eclipsar todos mis otros pensamientos.
Me sentí culpable por intentar salir sin avisarles, como siempre. Después de lo sucedido, si despertaban y no me veían, se asustarían demasiado. Me dispuse a regresar a mi cama.

 - ¿Qué pasa? – Me preguntó Louis - ¿Estás bien?
- Si, no te preocupes, quería salir a caminar pero pensé que si despertabas y no me veías llamarías a los bomberos.
- O al FBI – Me dijo entre una sonrisa y un bostezo.
Despertó a Harry dulcemente.
- Amor, despierta, Adeline quiere dar un paseo por el hospital, parece que no le bastó con que la asustaran los vivos, ahora también quiere toparse con algunos fantasmas de antiguos enfermos – Le dijo con otro bostezo.
- Podemos filmarlos y tal vez nos hagamos famosos en internet – Le contestó mientras se incorporaba y se tallaba los ojos.
- Mi amor – Le dijo dulcemente – Tú ya eres famoso.
- No como caza fantasmas - Le contestó.
- Además ya odio al mundo demasiado por amarte, es decir, lo entiendo, ¿Quién puede no amarte? Pero te quiero solo para mí - Le dijo Louis en un intento de explicación.
- Yo soy solo para ti. – Le dijo Harry inclinándose para besarlo.

 Cuando por fin salimos, después de un largo debate acerca de los inconvenientes de la futura "fama" de Harry, compramos chucherías en las maquinitas del pasillo y dimos una larga caminata. Cuando estábamos por regresar a la habitación sentí una mano en mi hombro que me hizo saltar y soltar un grito ahogado.

 Ojalá Harry lo esté grabando, pensé mientras me volteaba para comprobar que era solo una señora. Se notaba apenada, no quería molestarnos. Habló mirando a Harry.
- Joven, por favor disculpe ¿Es usted este muchacho? – Le preguntó la mujer mostrándole una playera chica con una foto de One Direction muy vieja, señalando a Harry que llevaba el pelo muy enchinado.
- Sí. – Le dijo Harry con una gran sonrisa. - ¿Quiere que se la autografíe?
- En realidad no solo eso. No quiero ser inoportuna pero mi hija está internada aquí y su mayor sueño es conocerlo. – Le dijo con los ojos llenos de lágrimas. – Si pudiera verla solo un momento...

Nos explicó que su hija de solo 14 años, tiene una falla renal y que por su tipo sanguíneo tan raro no han podido conseguir un donador, de modo que, su estado de salud se ha deteriorado dramáticamente al grado de que no le dan más esperanzas de vida. Si no encuentran inmediatamente un donador moriría en cualquier momento.

 - Cuando sus órganos comenzaron a fallar, ella se conservó optimista y animada pero conforme fue pasando el tiempo, con su salud se deterioró también su esperanza. Se deprimió y dejó de sentir ganas de vivir. En navidad, una institución benéfica le regaló una computadora portátil y allí fue donde conoció más a fondo a One Direction. Usted es su favorito – Le dijo a Harry – Y de algún modo llegó a la conclusión de que...

AdelineWhere stories live. Discover now