Capítulo : No es fácil

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Harry estaba tumbado sobre la cama. Dejó caer el teléfono al suelo.

-Dicen los abogados que Modest tiene razón. Que no tengo derechos porque están pensados para mujeres.

Niall se quitó las zapatillas y se tumbó a su lado. Desde hacía meses dormían juntos porque se habían plantado ante Modest.

-Tienes que tomarte las cosas con calma, Harry. -Niall le acarició el vientre. -Pueden obligarte a trabajar, pero no a hacerlo al cien por ciento.

-Ni siquiera iba a coger ya la baja.

-Bueno, más adelante seguro que contamos con apoyos públicos -Niall puso morritos para que Harry le besara -He estado adelántandome a Modest. Seguro que ellos querrán una rueda de prensa o algo. La semana que viene vamos al programa de Ellen.

-¿A Ellen?

-Sí. Les he dicho que tenemos algo que anunciar.

-Es genial.

Niall se tumbó en la cama. Harry le miró.

-¿Qué vamos a hacer?

-Ah, lo que quieras. Estoy dispuesto a lo que sea -dijo Niall quitándose los calzoncillos.

-No, Niall. Me refiero a... bueno, ahora vamos a ser padres.

-No te alteres -dijo Niall -vamos a hacer las cosas bien y despacio.

-Deberíamos...

Niall le puso una mano en la boca.

-Harry. No empieces con los deberíamos. Tú sólo piensa en el bebé y en cuidarte. Yo me encargaré de toooodo lo demás.

-Vale. La verdad es que ha sido un día largo y cansado.

-Está bien -Niall lo abrazó.

-No tan cansado -se rió Harry.

Las diez de la mañana.

-¿Dónde vas tan temprano? -preguntó Harry al ver a Niall coger ropa. -Vuelve a la cama.

-Son las diez, Harry. Tengo unas cosas que hacer. ¿Estás mejor?

Harry negó con la cabeza. Las náuseas habían empezado a las siete y su punto más alto había sido hacia las nueve, con tres visitas al baño.

-Al menos ya sabemos el motivo -dijo Niall cogiéndole la mano.

-Nuestro bebé me odia. Y tú me dejas sólo.

-Harry, tengo que hacer algo. No te dejo sólo. Y el bebé no te odia. Las náuseas son normales. Y sólo estás de cinco semanas, así que mejor te acostumbras.

-Ya nunca me llamas Hazza.

Niall se rió.

-Te llamaré como quieras. -le besó -ahora debo irme.

-Bueno. Más te vale que sea por un buen motivo y no porque vayas a ver tenis o algo así.

Liam miró a Niall con impaciencia.

-Llegas tarde.

-Harry no se encontraba bien.

-Te esperan unos meses complicados. 

-Vamos, quiero pedirle matrimonio lo antes posible. Soy un caballero.

Liam se rió y Niall arqueó las cejas.

Niall fue a comprar el anillo y hacer otras cosillas. Sus padre estaba ocupado, al igual que el marido de Anne, pero Maura ya estaba en un vuelo. Esa noche Niall tenía grandes planes.
Y Harry estuvo a punto de arruinarlos.

-No me apetece salir.

Niall se apretó los ojos.

-Vamos a cenar con nuestras madres. Ah, y con Liam y quizá Louis. Te apetece.

-No me entra la comida y no puedo beber. Y estoy cansado.

-Harry, por favor.

Harry se encogió de hombros y se sentó en la cama.

-¿Es porque te dejé sólo por la mañana, verdad?

-Y aún no me has dicho a dónde fuiste.

-Ahora mismo te vas a vestir.

-¿Tú me vas a obligar?

Niall asintió. Harry puso los ojos en blanco.

-Está bien.

Niall le vio entrar en el baño. Comprobó que llevaba el anillo en el bolso de la chaqueta.
Todo bajo control.

Nuestro pequeño milagroWhere stories live. Discover now