Que Comiencen las Aventuras

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─Es tan lindo que ya casi se acabe el semestre, no tener que ver más a la vieja esta de los sábados suena taaaaaaan hermoso ─dice Andry, estirado los brazos al cielo, mientras van caminando para salir de la universidad.

─Definitivamente ─apoya Dany, acomodando el tirante de su bolso que cruzaba en medio de sus pechos, entrelazando un brazo con el de Silvia.

─ ¿Entonces, que hacemos ahora? ─pregunta la más alta.

─ ¿No nos vas a acompañar a la tienda? ─Dany hace puchero.

─ ¿A qué tienda? ─pregunta la más alta descolocada.

─ Recuerda que Dany se ganó el juego ese y tiene que ir a reclamarlo con Edinson y Luis ─resalta con picardía ambos nombres.

La aludida se sonrojó levemente ─ ¡sí, ya quiero tenerlo! ─dice emocionada, dando pequeños brinquitos.

─y Ángel también se lo ganó, le veré en la tienda.

─ ¿Tu hermano también? ─pregunta Dany ─ ¿por qué no lo habías dicho? ─reclama.

─ ¿No lo dije?

─ ¡No!

─Ah. Se me olvido

Dany le dio un golpe en la frente.

─ ¿Y los vas a encontrar en la tienda? ─pregunta Andry.

─Pues... ─el sonido de su teléfono la interrumpió ─hablando del rey de roma ¿Alo?

─Hola gatita ¿dónde estás?

─Saliendo de la U ¿y tú? ¿Estás con Luis?

─Si, estamos en la puerta del centro comercial.

─Ah bueno, ya voy para allá, espérenos.

─Bueno ─y ella colgó.

─Vamos, están aquí al lado, en el Americano.

─Bien, vamos ─asiente Silvia.

Las tres féminas caminan tranquilamente por la salida y luego a la derecha para dirigirse al centro comercial, para buena suerte el sol estaba cubierto por unas cuantas nubes esponjosas y claras que no tenían pinta de lluvia.

Nada más divisar a los dos chicos en las escaleras de entrada Dany corre a abrazar al menor. Luis la recibe con los brazos abiertos, devolviéndole el abrazo.

─Hola Dany.

Luego se separó del moreno para abrazar a Edinson, Andry y Silvia también se acercan a saludar.

─Démonos prisa, ya quiero tenerlo ─apresura entusiasmada.

─Pues vamos ¿dónde queda la tienda esa? ─dijo Luis.

─Bajando por allí unas cuatro cuadras ─indica Dany ─tu solo sígueme ─guiña un ojo, sacando la lengua ─follow the leader ─bromea.

Los cinco caminan tranquilamente hacia su destino, conversando amenamente e intercambiando bromas y risas.

─Entonces ¿con qué juego vamos a empezar? ─pregunta Luis.

─ ¡Con Jotho, de cuarta generación! ─se adelantó Dany.

─ ¿Quién lo decidió? ─le pregunta Edinson.

─Yo lo estoy proponiendo ¿qué no oyes?

─Me parece bien, pero ¿qué juego en específico, el oro o plata?

─Siempre y cuando sean de la misma generación y región los diferentes jugadores pueden entrar desde cualquiera de las ediciones ─dice Edinson.

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