Murderer |Clockwork|

«Cuatro»

Point of view ― Andrew

Todo dentro de la retorcida mente de Andrew comenzaba a recrear diferentes sucesos ocurridos con anterioridad; generando solamente que la culpa empezara a consumirlo lenta y dolorosamente, pensando cómo había sido capaz de hacer tal atrocidad contra la mujer que la había dado la vida.

―Andrew... ―una voz se hizo presente entre las penumbras, haciendo que cada vello de su cuerpo se erizase en segundos. El tono de esa voz era casi sacado como de una película de horror; como la de una pobre alma en pena.

Al instante el abrió sus ojos, solo para encontrarse con la fría y extensa oscuridad.

Su corazón latía rápidamente; cayendo por completo en las feroces garras del miedo. El no entendía lo que estaba ocurriendo, y eso solo empeoraba las cosas. Su vista no era capaz de ver más allá de toda esa oscuridad; desconociendo completamente lo que allí se encontraba.

Una débil presencia emergió a sus espaldas; algo que causo que Andrew se volteara casi de golpe, intentando saber quién o que estaba asechándolo desde aquel mar de oscuridad.

Los ojos color avellana de Andrew se hicieron notar entre las penumbras; abriéndose de par en par, casi como si hubiera visto a la misma muerte en persona.

El deteriorado cuerpo de la que alguna vez fue su madre apareció frente a él; con sus ojos totalmente desorbitados. De su cuerpo desprendía un horrible olor similar a carne podrida; con órganos sobresaliendo de un enorme corte que iba desde su cuello hasta su estómago.

Involuntariamente, Andrew comenzó a dar pasos hacia atrás.

―¿Por qué, Andrew? ―habló nuevamente esa tenebrosa voz; que provenía de los morados labios de aquella cosa que era similar a su madre―. Duele, estoy sufriendo... Hijo, ¿cómo pudiste hacerme esto? ―continúo hablando; a la vez que caminaba lentamente hacia Andrew.

El solo siguió caminando hacia atrás; intentando alejarse lo más posible de aquella horrible cosa. Sus piernas temblaban como si de gelatina se tratara; cosa que dificultaba que el consiguiera mantenerse de pie.

―¿Qué crees que haces? ―otra vos apareció; pero esta tenía un tono demasiado similar al de Andrew. Cuando esas palabras fueron terminadas; el temeroso de Andrew logro sentir una fría mano en su hombro derecho, deteniendo sus pasos.

Con temor, decidió girar levemente su cabeza; intentando ver por el rabillo del ojo a esa persona que poseía una voz ―demasiado― similar a la suya. Lo que consiguió ver a través de sus ojos fue la gota que rebalsó el vaso.

Una persona con sus mismos rasgos fue lo que vio; casi como si estuviera viendo su propio reflejo a través de un espejo. La única diferencia entre ellos era que su "otro yo" tenía unos ojos completamente de color negro; como si estos no tuvieran vida o... alma.

Su otro yo sonrió de manera macabra; haciendo resaltar sus dientes. ―¿Por qué huyes? ―le pregunto él; a lo que Andrew simplemente no respondió. Su cuerpo había sucumbido al miedo; cosa que hacía que no pudiera moverse en lo absoluto.

―Después de todo... ¡NOSOTROS SOMOS LOS RESPONSABLES! ―exclamó a todo pulmón su igual; para luego reír histéricamente sin ningún control.

Sin resistir más; Andrew gritó.

Él no podía ser el autor de la muerte de la persona que más amaba en este mundo; simplemente no era capaz de pensar que tal atrocidad fuera verdad.

Sus ojos nuevamente se abrieron casi de golpe; con algunas gotas de sudor frio recorriendo su frente. Podía sentir como su corazón estaba totalmente acelerado, casi como si fuera a desprenderse de su pecho.