2; Historia.

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Leigh's POV

-Buenos días Leigh- Wanda con su suave acento, a diferencia de su hermano, ella poseía una voz mas dulce y suave, pero aún así la voz de Pietro lograba que mi estomago cosquilleara.

-Buenos días- sonreí sentándome sobre la isla posesionada justo en el medio de la gran cocina-. ¿Donde están los demás?- pregunte antes de darle una mascada a la manzana entre mis dedos.

-El Capitán, Natasha y Clint se fueron anoche a una misión, Tony y Banner están en el laboratorio, y Thor junto con Visión están en algún fuera de este planeta- contestó sin quitar la mirada del libro en sus manos.

Ya hacían una semanas que me encontraba en la Torre Stark, luego de que Pietro y Wanda lograran convencerme, Tony puso a disposición una amplia habitación para mi sola, se había encargado de comprar todo lo que fuese necesario para mi y me presento al resto del grupo como la nueva integrante la familia, a lo que ellos contestaron con abrazos y palabras de agradecimiento por haber salvado a uno de ellos.

-¿Donde esta Pietro?- quince saber intentando no soñar necesitaba, pero la verdad es que ya me había acostumbrado a la presencia del platinado junto a mi durante el día. Y es que Pietro se había propuesto cuidarme y no dejar que nada malo me sucediera.

-¿Apuesto a que no viniste eso venir princezna?- sonrío Pietro a mi lado, reí.

-Viste, querrás decir viste- lo corregí, logrando un bufido saliera de sus labios.

-Si si, viste- repitió entre dientes y luego quito la manzana de mi mano para darle una mordida.

-Pietro- regaño Wanda-. Es de mala educación arrebatar cosas que no son tuyas.

-Ya...- rodó los ojos dejando la manzana de vuelta en mi mano, el leve roce de su mano con la mía fue suficiente para que un destello llegara a mi mente.

"-Esto es mi culpa...- sollozo Wanda en los brazos de Visión, mientras él intentaba consolarla-. Debí llegar antes.

-Esto no es tu culpa- negó Pietro con la cabeza entre sus manos-. Yo jamás debí dejarla sola... Debí quedarme princezna meu- sollozo."

El dolor llego rápidamente a mi, todo comenzó a dar vueltas a mi alrededor mientras la presión aumentaba en mi pecho.

-Leigh, ¿estas bien?- Wanda ser acerca preocupada, mientras Pietro me lleva a su pecho para que no caiga.

-La llevare a su habitación- él platinado se encargó de tomarme en sus brazos y cargarme hasta la comodidad de mi cama, dejándome con delicadeza sobre el suave adredon de algodón-. ¿Qué fue eso Leigh?- preguntó preocupado mientras quitaba algún mechón de mi rostro.

-Es parte de lo que hago...- hable sintiendo el aire volver a mis pulmones-. Puedo ver a través de las personas, pero eso requiere un gasto de energía- sonreí a media intentando tranquilizarlo.

-¿Lo puedes controlar?

-La mayoría del tiempo- me encogí de hombros, él asintió-. Gracias- Pietro me miro confundido-, por cuidar de mi desde que llegue.

-Princezna...- entrelazo sus manos con las mías-. Lo que tu has echo por mi, jamás podré compensártelo- sonrío dejando un beso mis nudillos-. Lo menos que puedo hacer por ti, es cuidarte- finalizó dejando un cálido beso sobre mi frente-. Eres tan pequeña y delicada, que aveces creo que hasta podrías quebrarte con solo una mirada- dijo con su fuerte y encantador acento, para luego reír.

-Hey- lo golpee en el hombro-. ¿Acabas de llamarme débil?

•••

-Entonces, Leigh- me miro Steve con una sonrisa-. Cuéntanos un poco sobre ti.

Todos en la mesa dirigieron su atención hacia mi, desde Thor que se encontraba en el otro extremo de la mesa hasta Natasha a mi lado.

Me encogí de hombros-. No hay mucho que contar- dije en un suspiro y sentí la mano de Pietro en mi rodilla por debajo de la mesa, dándome apoyo-. La verdad es que no tengo familia, supongo que en algún momento la tuve, pero desde que tengo memoria vivi en el orfanato en Roma- dije y recibí una sonrisa de apoyo de los gemelos-. Cuando cumplí los catorce, fui obligada a dejar el orfanato, ya que no podían seguir cuidando de mi y comencé a vivir en las calles, solo duro un par de semanas, luego un grupo de sujetos me capturó y me llevo hasta una fábrica a las afuera de la ciudad, fue cuando comenzaron los experimentos....-

-¿Qué fue lo que te hicieron?- preguntó Bruce mirándome, podía sentir a impotencia de muchos a mi alrededor.

-Pulsaciones electromagnéticas- dijo en un hilo de voz, cerré los ojos intentando mantener los recuerdos alejados de mi mente.

-¿Como lograste escapar?- esta vez fue Thor que hablo.

-Creyeron que estaba muerta- suspire dejando mi plato de lado-. Hubo una explosión en la fabrica, algún experimento salió mal y todo el edificio estaba en llamas, solo recuerdo los gritos a mi alrededor y como todo se tornó negro... Cuando desperté, ya no había nadie, así que volví a la ciudad y me quede en un refugio.

-¿Como fue que terminaste en Sokovia, y precisamente el día del ataque?- a mi lado Natasha parecía más sorprendida que confundida.

-Pues...- alargue mirando un punto fijo sobre la mesa de cristal-. Luego de que alguien intentará acabar con mi vida, por cuarta vez, comencé a avanzar sin rumbo alguno hasta que llegue a Sokovia, de echo, ya llevaba varias semanas en ese lugar- suspire-. En cinco años se puede avanzar mucho.

Natasha me regalo una sonrisa comprensiva a mi lado, Thor me miro espera que comprendida su apoyo al igual que el Capitán, Tony parecía realmente fascinado junto con Bruce y Clint, mientras que los mellizos Maximoff me daban sonrisas de afecto.

Me sentía como en casa, por primera vez en la vida, me sentía bien en un lugar.

Before you go. |Pietro Maximoff/ Quicklisilver|Where stories live. Discover now