Capitulo O4

14.9K 959 28
                                    


-¿Papi?
-Si-me susurró, mientras sus penetrantes ojos me veían... me retorcí en mi asiento.
Reuní todo mi coraje, agradecida por la copa de vino que acababa de tragar. Me aclare mi garganta.
-Tengo muchas ganas de hacerte sentir mejor.
-Bueno...-dejó de hablar y miró hacia abajo mi mano. La estaba moviendo lentamente hasta su muslo. -Oh __________...
-¿Qué?
-No podemos hacer esto.
-¿Por qué? -continúe con mi trayectoria. Se quedó allí sentado mirándome. Lo vi tragar un bulto en su garganta.
Jimin puso su gran mano y cálida en la parte superior de la mía, deteniéndome. -Cariño, no es correcto.
-¿Por qué no?
-No puedo tomar esto de ti. -Suspiró frente a mí. Penetrándome con la mirada otra vez. -Me he prometido que nunca me aprovecharía de ti.
-¿Te aprovecharías? -sonreí y me deslicé un poco más cerca de él hasta que mis pechos se apoyaron en su brazo. -¿Cómo tomarías ventaja?
Me miró el pecho, haciendo una mueca, pero no apartó la mirada.
-Eres una niña hermosa. Siempre has sido una niña tan hermosa.
Yo sabía que tenía que contar con él. No me importaba si era el vino, la simpatía, o la pura lujuria. Quería a Jimin el hombre que a menudo llamaba papi. Y yo quería darle una noche que nunca olvidara.
-No seas tan tímido, papi-le susurré.
-Mierda, bebé-negó con la cabeza suavemente, cambiando su mirada de mis pechos a mis ojos. -No quiero usarte. Eres mi preciosa niña.
-Tú eres precioso para mí también. -Mi mano todavía estaba en su pierna. Yo movía mis dedos contra el interior de su muslo. Su fuerte mano arriba de la mía no podía impedir que dejara de hacerlo. -Pero siempre he creído que eras sexy como el infierno. -Sonreí.
Jimin hecho la cabeza hacia atrás, riendo.
-Creo que el que está hablando es el vino.
-No, -cerré un poco mis ojos. -Sólo me da la audacia para decirte como me siento.
-Yo no sé, pequeña.
-¿Qué? ¿No crees que seas sexy?
-Corazón. -Cerró los ojos. -He trabajado muy duro para pensar en ti como una hija.
-¿Huh? -mi mandíbula se abrió. -Tú dijiste que siempre pensaste en mi como una hija.
Él asintió con la cabeza, abriendo los ojos, mirando profundamente en los míos.
-Pero no sin trabajo. Especialmente hace pocos años. Después de que llegaras a casa del colegio y...-él rodó sus ojos. -Parecías haber crecido de repente. Ya no eres mi niña, ahora eres una mujer.
-Si, papi-asentí lentamente, inclinándome hacia adelante para asegurarme de que no podía apartar la mirada de mis ojos. -Soy una mujer ahora. Y te puedo atender como tú necesitas ser atendido.
-Oh, cariño...-hizo una mueca. Su tono de voz delataba su dolor... su lucha.
Yo no quería que Jimin se sintiera mal por su atracción hacia mí, o se sintiera que se había aprovechado de mí, de ninguna manera. Infiernos, yo tenía veintiún años de edad y soy una mujer en plena madurez. Incluso se más de mis propios deseos sexuales, y solo quería recordarle el increíble hombre que era. No merecía que una mujer lo dejara como mi mamá lo hizo.
Yo sabía lo que tenía que hacer. Solté su mano y me puse de pie.
-¿Qué quieres hacer? -me volví de espaldas hacia él y me incline. -Sólo quiero otra copa de vino. -Tomé la botella de vino y vertí un poco en mi copa, a la vez que movía mi culo en el aire tanto como era posible.
-_________...
-¿Qué? -pregunté inocentemente. Entonces levanté la cabeza el tiempo suficiente para beber todo el contenido de la copa que acababa de verter, y luego puse mis manos en la mesa plana y moví mi parte trasera para hacerla más prominente.
-¡Maldita sea!-Jimin gritó, respirando pesadamente. -¿Qué estás tratando de hacerme?

Sex With My Ex-daddy's⇨Jimin (HOT)(adaptada)Opowieści tętniące życiem. Odkryj je teraz