Muchas de vosotras me pedisteis un imagina como el de Luke de "Turn him on" así que aquí tenéis uno con Michael.. pero este es un poco diferente.. ;)
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Smut: ♬♬♬♬/6
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Estaba bebiendo mi café en la cocina mientras Robbers sonaba en mi reproductor de CDs cuando mi mejor amiga entró en la cocina.
"Tía, Michael está aquí por tu hermano, ¿por qué no aprovechas e intentas echarle un polvo?" Preguntó ella "Lo necesitas, estás amargada." Aseguró y yo la asesiné con la mirada.
"No estoy amargada." Advertí.
"Ya.." Murmuró no muy convencida.
"De todas maneras, no voy a ir mendigando un polvo." Aseguré "Tengo dignidad, ¿sabes qué es eso?" Dije con sarcasmo y ella sonrió sarcásticamente.
"Yo sólo lo decía, Michael está bueno y estaría dispuesto a acostarse contigo." Se encogió de hombros "Seamos sinceros, Michael estaría dispuesto a acostarse con cualquiera." Aseguró.
"Que no, hostia." Contesté molesta "A demás, Michael no me pone, sería como acostarme con mi hermano." Hice una mueca y escuché que alguien carraspeaba la garanta, pero no fue Mary, fue Michael desde la puerta "Oh, genial, lo que me faltaba." Murmuré, volviendo a darle un trago a mi café.
"Bueno, creo que me voy al salón que ya ha empezado Keeping Up with the Kardashians." Nos informó Mary y yo maldije una vez más cuando nos dejó solos.
"¿No te pongo?" Preguntó Michael con una sonrisa que me empezaba a dar miedo por sus intenciones "¿Sería como acostarte con tu hermano?" Añadió acercándose a mí y yo dejé mi café en la encimera, cruzándome de brazos.
"Michael, ni lo intentes." Pedí y él puso sus manos en mi cintura.
"¿Que no intente qué..?" Sonrió haciéndose el tonto "Sólo intento demostrarte que sí que te pongo." Susurró en mi oído, metiendo sus manos por debajo de mi camiseta "Y me apostaría 100 dólares a que ahora mismo estás mojada." Rió roncamente y mi piel se erizó.
Habría perdido la apuesta.
Michael bajó sus manos a mis muslos y me subió a la encimera, situándose entre mis piernas.
"Michael.." Susurré temblorosamente cuando sentí su respiración en mi cuello.
"¿Mh?" Pude notar que sonreía..
Y justo en ese momento no pude evitar sonrojarme cuando Sex empezó a sonar.
Su punta de la nariz rozó mi cuello cuando volvió a mi oreja y volvió a susurrar algo.
"Estás jodidamente sexy vistiendo sólo esa camiseta." Susurró y mordió el lóbulo de mi oreja.
"Mhh.." No pude evitar gemir.
"Si ahora te propusiera subir a tu habitación a echar un polvo, ¿aceptarías?" Murmuró muy cerca de mis labios y mordió el inferior, llevándome al límite.
"Mhmm.." Asentí con la cabeza y él sonrió, agarrando mi mano y bajándome de la encimera.
"Vamos, princesa." Murmuró y nos dirigimos a mi habitación.
