Oscura Inmortalidad

3.-La espera.

- ¿En serio?, ¿eres tu la hija de Alice?.- Me dijo con cara de estupefacto.

- Mmmm.. Si, soy yo, Melody, ¿Porque tanta preocupación?

-He venido para llevarte conmigo, te necesitamos.

-Espera...¿Yo? ...No puedo ir con un desconocido, ¿Y como conoces a mi madre?.-Dije con gran intriga.

-Es una larga historia, te lo contare por el camino, tu madre ya esta allí .-Dijo con un tono más brusco.

-¿Mi madre? ¿Cuando llegó? ¿Que hacía allí?.-No entendía nada.

-Mira chica, te lo contaré todo, pero tenemos que irnos ya.-Saco un spray de su mochila y me la esparció por mi cuello y en un abrir y cerrar de ojos ya me encontraba en el coche.

-Que dolor de cabeza... ¿Que ha pasado?.-Dije mientras me incorporaba.

-Te tienes que relajar, he tenido que dormirte con un spray, lo siento, lo tenía que hacer porque sino no hubieses venido conmigo. No te pongas nerviosa, ya que, en cualquier momento te puedes llevar un susto.

-¿Cuánto tiempo llevó desmayada? ¿Dónde vamos?.-Dije con tono asustado.

-Llevas 2 horas desmayada y la última pregunta lo averiguarás cuando lleguemos. Melody tu eres una chica muy especial cuando lleguemos sabrás de que va todo esto.

-¿Especial? Yo no soy especial, sólo soy una chica como cualquier otra.

-¡No!, tu eres especial.. No puedo decirte el que, cuando lleguemos lo sabrás..

Me quede callada, parecía que se estaba empezando a enfadar. Miré por el lado izquierdo de mi ventanilla, vi como nos adentrábamos cada vez mas hacía un bosque donde la luz no alcanzaba a ver.

Después de dos horas conseguimos llegar hacia nuestro destino, no sabía lo que me esperaría...

Había 2 hombres esperando en la entrada de una enorme casa.

-Melody... Antes de que salgamos prométeme que no te rendirás. -Me dijo con cara de angustia.- Cuando salgas te llevarán con tu madre y te explicaré lo que deberás de hacer, no podrás volver a atrás.

-¿De qué me estás hablando Erik?.-Me dió un escalofrío por la espalda.

-Acompañame por favor.- Sus palabras se volvieron frías y amenazadoras.

Salí del coche y nos dirigimos hacía esas dos personas que nos esperaban, me pareció verles los ojos de un color bastante raro pero no le di importancia y me adentré a esa casa... Definitivamente no tenía ni idea de lo que esto iba a cambiar mi vida radicalmente.

Me adentré a una sala bastante grande y ahí se encontraba mi madre, muy tranquila, cuando la vi fuí corriendo a abrazarla, pensé, que la habían hecho algo, menos mal que no fue así.

-¡Melody! ¿Que haces tan pronto por aquí? Erik te tenia que traer mañana, no hoy. -Dijo mientras le miraba enfadada.

-Lo siento mucho Alice, pero en el pueblo corría un gran peligro, les oía cerca de nosotros....-Dijo mientras mi madre me miraba con preocupación.

-Has hecho bien Erik.

-¿¡Pero alguien me quiere explicar que pasa aquí!?.-Dije con tono enfadado.

-Siéntate hija mía, hay algo que no te he contado nunca y tiene que ver un poco con tu padre. -Me agarró la mano con fuerza, suspire al no entender nada y me preparaba para cambiar mi vida.

-¿Que pasa madre?.

-Esto es muy difícil de decir, hija, te he estado escondiendo un secreto pero lo hice para protegerte, te están buscando por todas partes.

-¿Qué secreto? ¿Y porqué me están buscando? ¿Quienes?

-T-tu padre.. Ha despertado..

-¿Papá? Él murió hace mucho, ¿como va a ver despertado?.-Tenía mucha confusión mi ritmo cardíaco aumentaba y noté cierta tensión en los dos hombres de antes.

-Hija, no estas entendiendo nada, a él le mataron, pero un vampiro le transformó y ahora... Viene en busca de venganza.

-¿QUÉ? ¿Un vampiro? ¿Que disparate es ese?. Los vampiros no existen.

-Calla y escucha a tu madre.- Dijo Erik con tono brusco. Sé que no le caía muy bien.