Pacto con un Vampiro

Capítulo 52|"La sorpresa"

Nos encontrábamos en la casa de Arúna. Ya había estado allí anteriormente, y en todas aquellas ocasiones me había parecido que el chico este abusaba del incienso, pues apenas entrabas en el lugar podías sentir el aroma impregnando en tus fosas nasales. Llegando al punto de ser desagradable.

Derek no había hecho problemas para venir, a diferencia de Hunter, quien había estado todo el tiempo con cara de amargado, pero bueno, al menos guardaba silencio.

Fue un poco difícil hacer que Hunter y Derek se pusieran de pie, y además, para caminar necesitaban de nuestra ayuda, ya que no podían mantenerse en equilibrio. Así que, podría decir que el trayecto fue bastante complicado. Derek se apoyaba en Arúna y Hunter en mí, parecía que estábamos ayudando a unos borrachos a caminar en equilibrio.

En fin, ya estábamos en la casa del chico y a pesar de que me parecía súper rara la situación, no hice mucho problema. Si Fei confiaba en él, yo también lo haría..., o al menos en parte.

ㅡ Hace bastante tiempo que no tenía a un Vampiro puro en casa ㅡ comentó Arúna animadamente mientras se acercaba a nosotros con una bandeja, que cargaba unas pequeñas tazas.

ㅡ ¿Y eso? ㅡ preguntó Hunter con recelo, señalando a las tacitas.

ㅡ Té de hierba ㅡ respondió él, sonriente, en lo que nos entregaba a cada uno una taza pequeñita.

ㅡ No bebo nada que no sea sangre, gracias, pero no gracias.

ㅡ Pues dame a mí el de Hunter ㅡdijo Derek, quitándole la taza de té a Reynolds.

Hunter bufó. ㅡ ¿Para qué nos trajiste acá?

Arúna bebió un poco de té y luego respondió; ㅡ No podía perder oportunidad, no siempre te encuentras a un Vampiro puro. Verás..., soy brujo y necesito un poco de sangre de Vampiro para mis pociones, pensé que podrías ayudarme con eso.

Hunter lucía mucho más molesto ahora. Lo ataqué con la mirada para que no fuera a hacer, ni decir nada imprudente y afortunadamente funcionó.

No había probado el té todavía, así que decidí que era momento. Tenía bonito aspecto, y olía de maravilla. Comprobé que su sabor era exquisito cuando bebí un poco.

ㅡ Abby, deja eso ㅡ me ordenó Hunter mirándome con reproche.

Fruncí el entrecejo. No entendía por qué le molestaba tanto Arúna.

ㅡ Sólo es té, voy a beberlo.

Él bufó. ㅡ Es té de hierba; té de cannabis. Hasta donde sé tú no usas eso.

Abrí con los ojos con incredulidad y observé fijamente a Arúna. ㅡ ¿De verdad es té de Marihuana?

Este asintió. ㅡ Pero, tranquila..., no te hará ningún daño.

ㅡ Yo preferiría que no lo bebieras ㅡ sentenció Hunter, observándome fijamente.

ㅡ Si no lo quieres, me lo das ㅡ comentó Derek, quien ya se había terminado el de Hunter.

Me quedé observando por unos segundos la pequeña tacita en mis manos. Lucía bien, sabía bien, ¿qué tanto mal podría hacerme? Además se trata de una hierva medicinal..., supongo que no pasará nada malo si bebo esto.

ㅡ Abigail... ㅡ Hunter murmuró mi nombre lentamente y a tono de advertencia, cuando yo llevé nuevamente la taza a mis labios para beber el contenido.

No hice caso, a pesar de la insistente mirada de reproche que tenía Hunter en mí.

ㅡ Oye, este... ㅡ empezó a hablar Derek. ㅡ Si te sirve, yo podría darte un poco de mi sangre.