SAVE me "2da temporada de Mi Perdición"

Cap 22

Había pasado una semana....una semana  donde Hitomi no me dirigió la palabra, una semana donde pude ver lo ridícula que me siento en un lugar desconocido, sungjae me acompañaba a donde iba, no me dejaba sola...era demasiado raro, como si me protegiera de cerca o intentará asegurarse que estaba bien, aquella semana...cierta persona no había asistido a la facultad, no había señales de él ni de jimin, en el comedor el grupito estaba casi completo....incluso v no estaba asistiendo, todo era muy extraño, y la verdad aquello me inquietaba.
—sungjae, podrías parar de seguirme? -dije cansada- estoy bien, tranquilo. Porque ese repentino cambio?
—lo lamento, pero no puedo dejarte sola...todos aquí te miran como si esperaran a que me aleje de ti para atacar -los miro serio- te recuerdo que ha sido una semana donde has salido ilesa, incluso no has pasado por la bienvenida, eres la primera a quien no le han tocado un pelo...y es realmente muy extraño.
—sungjae no seas paranoico, ellos simplemente no se meten conmigo porque tú eres mi prometido, no me tocan por ti, no es obvio?
—TN, incluso si fueras mi esposa oficialmente, la tradición de la bienvenida nunca ha sido cancelada o mejor dicho, jamás se anula.
—pues, creo que tengo suerte.
—no, esto no es suerte, algo traman....necesito tu celular -dijo extendiéndome la mano- rápido.
—para que lo necesitas? -le dije desconfiada, no me gustaba cómo sonaba eso-
—te descargare una aplicación...-hizo una pausa- solo para que esté tranquilo.
—qué clase de aplicación sungjae? -dije con una idea en mente y no me agradaba en lo absoluto-
—es por tu seguridad TN, dame ya el celular -dijo intentando quitármelo-
—una aplicación de rastreo verdad? -dije alejándome de el- no sungjae, ya te dije que no era un puto perro....si lo quieres -dije para comenzar a retroceder- ven por el!!! -dije aquello para echarme a correr-

Corrí lo más rápido que podía, me pase los pasillos a toda velocidad, para ser chica, mi velocidad es muy buena, sin embargo tengo la desgracia de tener un prometido con cuerpo de atleta...y el fácilmente estaba alcanzándome...tenía que mantener a salvo mi celular...Penélope! Ahora es cuando te necesito más que nunca!
Ve a la izquierda
Oh, claro el bosque...ahí no podrá encontrarme fácilmente

Me dirigí hacia el bosque, me adentré a lo más profundo, tratando de recordar mi lugar secreto y favorito de esta facultad....me percaté que sungjae no estaba detrás de mí...eso fue raro, el no se rinde fácilmente.
Estando tan concentrada en donde podría estar sungjae, de pronto mi cuerpo choca con uno y ambos nos caemos al suelo...levante mi mirada, para encontrarme con la de Hitomi.

—que haces aquí? -ambas lo habíamos dicho al mismo tiempo, era gracioso, pero el ambiente no era justamente uno amistoso-
—yo estoy tratando de escapar de sungjae.
—el motivo que esté aquí, no te incumbe, lamento haberte tirado -dijo para darme su mano y ayudarme a levantarme- ahora, me tengo que ir -dijo para comenzar a caminar-
—Hitomi! -la llame, pensaba en decirle que me perdone por mi estupidez, que la extrañaba y que vulva a ser mi amiga, pero yo simplemente dije...- lamento haberte tirado también.
Eso fue lo más inteligente que has podido decir?
Que esperabas Penélope? Que le pida perdón y que todo vuelva a como antes y que ella esté en peligro como en el comienzo?
Al menos ella no merece que la traten de esta forma
Lose, pero no puedo hacer nada para poder remediarlo

Iba de regreso a la facultad, pero unos Fuertes brazos me abrazaron, me había atrapado...
—ahora dame ese celular
—de acuerdo, pero primero suéltame.

Le di mi celular, iba a borrar aquella aplicación cuando tuviera la oportunidad pero sungjae hizo algo inteligente.
—sé que intentaras borrarlo, para eso necesito que me prometas que no lo harás -dijo colocándose frente a mi-
—no puedo prometerte eso...
—tendrás que hacerlo si quieres tu celular devuelta.
—ok, lo prometo...ahora me lo das?
—no hasta que me convenzas.
—de acuerdo, no lo borrare...y lo digo enserio, te lo prometo -dije levantando mi mano-
—bien, ahora vámonos. -me tomo de la mano y me guió a la salida, era tan alto que me hacía sentir pequeña...diminuta e indefensa, pero a la vez segura-