18 no es un cuento de adas

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Ryder

Al despertar, La veo... Esta ahí tan indefensa, durmiendo plácidamente en mi pecho y me rompe el corazon saber que ni si quiera llegare a quererla.

Sí, sé que le dije que la quiero, pero por Dios, como no hacerlo, estaba confundido, supuse quererla, ahora pienso en tener una relación con ella, no me daré ni la opción de quererla, un día se iría y yo quedaría como un imbécil sufriendo.

Tengo que irme, pero se ve tan tierna que me dan ganas de quedarme. Decido levantarme e ir por su desayuno, tal vez si lo ve casi a su lado le de hambre.

Me ducho, visto y bajo a desayunar.

Al bajar veo a Gloria, la saludo y me dedico a comer en el desayunador.

luego de hacerlo me encamino con el desayuno de ella en manos.

Al adentrarme en la habitación observo nuevamente la evidencia de su virginidad.

Coloco en la mesa-estante el desayuno y me acerco a ella, me siento a su lado y acaricio su mejilla, es tan hermosa...
-¡CALLATE GILIPOLLAS!- grita mi mente sin paciencia.

Me levanto y al hacerlo ella abre un ojo, yo sonrío, luego abre el otro y me sonríe.

- hola- dice con voz ronca.

- hola nena- le sonrío -¿como te sientes?- de seguro no podrá caminar por algunos 3 días, pero que mas da.

- bien- dice sonriente.

-me alegra- digo y acaricio su mejilla.

- ¿y tu?- dice.

- bien- contesto- mira, ese es tu desayuno- digo señalandolo.

- oh, gracias- me sonríe.

Me acerco peligrosamente a ella y le susurro:

- me encantó lo de anoche- digo con voz ronca. Se sonroja y baja la mirada, liberando una pequeña sonrisa.

Beso sus labios ferozmente, masajeo cada rincón de su boca con mi lengua y al terminar, beso fugazmente su nariz.

- me tengo que ir- le digo y le sonrío.

Ella hace un puchero y se levanta de mi cama, al hacerlo hace un gesto de dolor, solo usa mi camisa, la que le coloqué mientras dormía y lleva el cabello suelto, al llegar frente a mi abraza lo 1ro que ve en su frente y eso es mas abajo de mi pecho.

Sonrío y aunque me molesta y trae algunos recuerdos, se lo permito... ¿qué? Ella me brindó su virginidad anoche y ni tenemos relación,
Eso fue cruel... pero es la verdad.

- te quiero- dice mirando hacia arriba para mirarme a la cara, está sonrojada y lo dijo como una pequeña de 3 años.

Aunque me da ternura... estoy horrorizado, no puede quererme, yo jamás la querré ni siquiera, le irá mal en esto.

- que bella- es lo único que digo, la abrazo con fuerza y la suelto.

- adiós- dice acomodando un cabello tras su oreja.

- adiós- digo acercandome y besándola.

***

Decidí dejarle la lista de reglas a Scarllet para que se informe, también le deje 3 guarda espaldas y a Logan, para que así la lleve a comprar alguna ropa para estar en mi casa... ya que pretendo que se quede todo el fin de semana.

Desido llamarla para contarle.

- ¿Hola?- contesta.

-hola Scar- digo simple.

Mi Playboy ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora