-Evangeline, no veo que esto avance, debemos apurarnos, nos queda hoy y mañana, debemos salvar a Julieta ya.-dijo Erices preocupado.
-Tranquilo, mi querido Erices, tengo un plan.
-¿Cuál?
Evangeline no respondió y salió de la cabaña, Erices supuso que debía seguirla así que lo hizo. Esta abrió un portal y entraron, llegaron a una ciudad que parecía abandonada, salvo una cárcel que estaba en mal estado y parecía que estaba abandonada.
-Ahí es donde está Julieta y Raider.-dijo apuntando la cárcel.
-Bien, debemos entrar.-dijo Erices decidido.
Comenzó a acercarse a la cárcel pero Evangeline lo detuvo posando su mano en el hombro de él.
Erices se volteó.
-¿Qué pasa?
-No podemos entrar aún, están juntos, ella está encarcelada y el está enfrente de ella sentado en un silla, están conversando.
-Pero están los dos solos. Y, ¿Cómo sabes eso?
-No te fíes de eso, Raider realmente quiere entrar al mundo de los sueños, sé que hará lo que sea para eso y, por que estoy usando mis poderes de telepatía.
- ¿Y los demás?...
-¡excelente idea!, vayamos a salvarlos a ellos primero y después nos encargamos de Julieta.
Erices suspiró y aceptó.
-Quizás sería mejor que nos disfrazáramos-sugirió Evangeline.
Antes de que Erices pudiera responder, Evangeline se convirtió en una mariposa y luego el en un pájaro. Volaron hacia la cárcel y entraron por una ventana que abrió Evangeline con su varita. El lugar era sombrío, estaba sucio y olía a abandonado y quizás a excremento de rata.
Al entrar se transformaron a su forma real, pero Evangeline sugirió que se hicieran invisibles, y eso hicieron, caminaron por un largo pasillo hasta que llegaron a una puerta, Evangeline antes de entrar posó su oído en la puerta para escuchar si había alguien ahí. No se escuchaba nada. Pero por precaución decidió atravesar la puerta con Erices y ahí estaban.
Tara, Ethan, Doomie, Sebastian y Philip, tenían la boca vendada y esposas en las manos, estaban encerrados en una especie de jaula que parecía la jaula de un león.
Erices y Evangeline se hicieron visibles y los fueron a ayudar, Evangeline movió su varita e hizo la jaula trizas. Luego Erices fue donde Ethan y le quitó la venda, después fue con Tara y Philip, Evangeline le quitó las vendas a Doomie y Sebastian.
-Julieta cumple 17 años mañana -dijo Ethan apresurado.
-Debemos darnos prisa-contestó Erices.
Sin más palabras se hicieron invisibles y buscaron a Julieta, de repente, Doomie sintió algo mientras caminaba y no pudo evitar chillar.
-¡Ay!
-¿Qué es lo que pasa?-preguntó Tara.
-Creo que "tropecé" con algo aquí abajo.
-No tenemos tiempo para tonterías Doomie-dijo Sebastian.
-¡Silencio!-susurró Erices.
Se acercó donde Doomie se había lastimado, había una alfombra, la movió y encontró una portezuela, la abrió y vió una escalera.
Miró a los demás y asintieron.
-Bajemos.
Primero bajó Erices y Ethan, luego los demás.
