Capítulo 4: A la luz de la luna

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Punto de vista Lauren
Después de una agotadora jornada firmando autógrafos, por fin terminé, cerré el libro que acababa de firmar

-Michas gracias por haberme acompañado hoy - le dije al chico que había sido el último en la fila- espero el libro no te decepcione - le guiñe un ojo y entonces Ally apareció con un micrófono y comenzó a hablar

-Agradecemos su asistencia a este día tan especial para Lauren, su familia, amigos y todos los que conformamos su equipo, a nombre de todos nosotros, les damos las gracias - dijo con su alegre tono de voz aunque sé que estaba cansada, yo lo estaba

Entramos a las salas de atrás, mi familia y amigos ya se habían ido a mi casa donde habría una reunión por el libro, no estaba de ánimos para una fiesta por dos razones, una por lo que pasó con Camila y dos lo que pensamos desde que lo planeamos, no podría con una fiesta después de firmar libros todo el día, yo pensaba que ya todos se habían ido pero...

-Lauren...

-Camila... Pensé que ya estarías en casa

-No, te quería esperar - Ally me miró y yo le sonreí

-Nos vemos allá Ally, prometo que no tardaremos - ella asintió y salió de la sala - y en realidad, no tenemos que tardar - dije ahora mirando a Camila -¿Traes carro?

-No, llegué en taxi - pude notar que había llorado, sus ojos se apagan y se ven cansados, odio verla así pero eso no quitaba que yo aún estaba muy enojada con ella por lo que había hecho

-Esta bien, entonces vámonos - tomé mi bolsa y salimos por la parte de atrás de donde fue el evento para subir a mi auto, un Audi A6 de color azul, Camila se subió en el asiento del copiloto, las dos íbamos en silencio, yo no tenía nada que decirle

-Escuché tu entrevista - mis manos se tensaron en el volante al momento que Camila habló, recordándome esa entrevista donde hablaron sobre mi dedicatoria

-¿La escuchaste toda?

-Si... La dedicatoria, es muy linda

-Si pues, tenía planeado leértela yo misma pero hay cosas que no se pueden no? Igual, seguramente en la segunda edición pueda cambiarla

-Espera... ¿La quieres cambiar? - su voz sonaba dolida pero yo también lo estaba

-Pues tal vez ese espacio se lo merezca alguien que en realidad se preocupe por lo que escribo o se alegre un poco porque saco un libro, alguien que si vaya a las presentaciones de mis libros y no se vaya a grabar canciones en una fecha que ya habíamos reservado ¡hace meses! - dije levantando la voz, inevitablemente

-Lauren, es que si me importa tu trabajo

-Pero te importa más el tuyo...

-No puede ser que estaremos peleadas por siempre por este día ¿o si?

-¿Tú me perdonarías que faltara a la presentación de tu CD?

-Pues...

-Camila respóndeme con la verdad, si te pusiste como te pusiste simplemente porque no te acompañe a una alfombra roja, no quiero imaginarme cómo te pondrías si llegara a faltar a una cosa más importante, lo de esa dedicatoria es lo de menos

-No la cambies, amé que me dijeras tu atardecer más preciado

-Tu amas todos los cumplidos que te pueda dar

En ese momento sonó el celular de Camila, y como está ya programado en el Bluetooth del auto...

-Siempre respondes directamente en el altavoz del auto.- ella algo nerviosa apretó el botón y respondió

-¿Bueno?

No me destruyas (Camren) Où les histoires vivent. Découvrez maintenant