Infiel

Capítulo 2

Jéssica

Bueno, empezar con un hola probablemente seria lo mas apropiado, pero seamos honestos...lo apropiado no es lo mío.

Mi nombre es Jéssica Jones, tengo 25 años, trabajo como licenciada en una empresa de telecomunicaciones, vivo sola, no tengo novio...pero sí un amante.

Sé perfectamente que lo que hago no está bien, no soy de esas amantes que quieren destruir la vida de la esposa o a su familia, que al final quieren quedarse con el esposo, no, yo soy más práctica. Lo único que busco es pasar noches de placer, me encantan las cosas prohibidas, y saber que en algún momento todo esto se va a saber no es algo a lo que le tenga miedo...pero tampoco algo que espero.

-¿No tienes miedo de que algún día esto se sepa?

-Tal vez, pero tomaré el riesgo

Sí, esas fueron las palabras que Nate me dijo la primera vez que tuvimos sexo, una de las mejores noches de mi vida, me encantaría agregar.

Les contaré un poco más acerca de Nate...

Su nombre es Nathaniel, pero yo prefiero llamarlo Nate, está casado y es un poco más grande que yo, no sé el nombre de su esposa ni tampoco de sus hijos, pero sé que los tiene.

Nate es un hombre muy apuesto. Es alto, musculoso, guapo, moreno claro, tiene unos impresionantes ojos color miel, sus labios son gruesos y carnosos y dios, su forma de caminar es tan sexy.

No soy una de esas personas que quieren ocupar el lugar de la esposa, tampoco soy una persona que hace esto siempre, Nate ha sido el tercer hombre en mi vida y sé que no va a ser el último, pero, por dios, tampoco soy de esas mujeres que se acuestan con el hombre que se atraviesan, por era soy exclusiva de Nate, no porque él me lo pida, si no porque así me gusta.

Nate no es lo que planeo para mi futuro. Sé que en algún momento la mentira saldrá a la luz, lo que tengo planeado es que cuando la verdad salga a la luz, por que en algún momento se sabrá si no es que ya se sabe, o cuando Nate se canse de mí o yo de él simplemente dejar de tener sexo y vivir la vida como se debe.

Sé que tal vez no es el plan perfecto, pero por lo menos tengo un plan.

En este preciso momento estoy terminando de tomarme una ducha después de tener una larga sesión de sexo con Nate. Cuando salgo. observo a ese hombre tan guapo acostado en mi cama viendo la televisión, voltea a verme y me sonríe, le devuelvo al sonrisa y busco ropa interior, me la pongo, luego me pongo un short y una blusa y me acuesto a un lado de él y me toma de la cintura.

-¿Volverás a tu casa hoy?- le pregunto

-No, le dije a Emily que no iba a llegar a dormir porqué tenía mucho trabajo.- me río.- ¿De qué te ríes?

-Nada, es solo que es una mentira tan estúpida.- le digo

-Bueno, te daré una hoja para que me des una lista de mentiras no estúpidas para decirle

-No es precisamente lo mío

-¿Qué es lo tuyo?, además de dar sexo hasta el cansancio

-Bueno...no lo sé, supongo que me gusta leer, no sé, no he descubierto mi talento.- me besa

-Encontraremos uno algún día.- me dice

Creo que no les había dicho pero Nate y yo llevamos tres meses siendo amantes, lo que sé de él es que trabajamos en la misma empresa, solo que el tiene un cargo muchísimo más alto que el mío, y bueno, lo demás ya se los conté.

-¿Qué cenaremos?- me dice

-¿Quieres que te cocine o pedimos algo?- le digo

-Sabes que adoro tu comida, así que quiero que cocines tu, lo que sea está bien para mí.- me dice, cabe resaltar que su esposa no cocina

-Bueno...bajare para ver qué puedo hacer y te aviso cuando esté listo.- al momento de querer levantarme me toma del brazo

-Me gustaría ayudarte a cocinar.- río

-¿Seguro?, recuerda lo que pasó la última vez.- le digo, el ríe

-Solo dejamos la cocina un poco sucia y te ayudé a limpiar

-La mesa.- le digo con un tono sarcástico

-También limpie las ventanas, algo es algo, sabes que no estoy acostumbrado a limpiar.- sonrío

-Es tierno verte hacer algo que no sepas.- le digo

-Me alegra que te diviertan las cosas que hago por primera vez.- me dice con un tono sarcástico, le doy un beso rápido en los labios

-Sabes que es mi especialidad.- le doy una palmadita en el muslo y me paro.- solo ponte un bóxer , baja y apresúrate.- le digo y así salgo de la habitación y bajo las escaleras dirigiéndome a la cocina

Se me olvida añadir que Nate no me mantiene, todo lo que tengo lo tengo por qué me lo gané trabajando, exceptuando por las cosas que Nate me regala, pero son simples, como pulseras o collares, nada fuera de lo común.

Abro el refrigerador y observo las cosas que hay, creo que ya se lo que voy a hacer.
Alguien me toma de la cintura y pego un saltito.

-¡Ahhh! - digo, Nate ríe

-Tranquila, y bien...Qué cenaremos?- le sonrío

-Lasagna y pizza...- le digo con una mirada y sonrisa cómplice

*****
Buueno, hola de nuevo, solo quiero pasar a contarles que ésta es una historia llena de secretos y cosas que solo descubrirán leyéndola disfrutándola. Y no se olviden de votar y comentarrrr.

Besitoss

Nancy.-