Mi mejor amigo.

Capítulo 1.

UNO.

Juliet's P.O.V.

Jodida Tessa, jodido Tristan, jodido juego, jodido Link, jodido Skull Kid, jodido viejo de las máscaras todas culiada....Okay, creo que Mara y Cara me están haciendo mucho daño. Muchas argentinas o lo que sean por hoy.

Preferiría quedarme aquí, en casita, viendo cómo Tessa le coquetea al chico que me gusta y tienen sex.....¿¡qué?! No dejaré que Tessa -zorra- Collins me quite a mi mejor amigo. Sobretodo cuando es mi hermana la muy hijueputa. Yo sé que mi hermana es trasvesti, y que en realidad es un hombre.

Me levanto de la cama, tirando las....cincuenta cobijas que tenía encima. Dejo en pausa el juego Majora's Mask y bajo las escaleras corriendo. Mala idea, en el quinto escalón tropiezo y caigo los siguientes dieciséis rodando. Mi cara queda estampada contra el suelo, y en el suelo está la camisa de Tristan....¿¡kaaa!? No me digan que esa zorra consiguió hacer "eso" con el sexy coreano de mi amigo.

Miro arriba, encontrando a Tristan, Cara, Mara, Delfina, Mathew, Ben, Will y Tessa jugando verdad o reto sobre la cocina. Jodidos amigos que tengo...

Me levanto y silenciosamente voy hacia Delfina, que estaba de espaldas. Esperen, pregunta. ¿Cómo es que no escucharon cómo mi rostro besó el suelo? Bah, están medio sordos los hijueputas.

—¡Nutella!- grito tomando los hombros de la antes nombrada Delfina. Esta grita como....como Lidya. -Woah, pensaba que eras tú la marimacha.

—¡Juliet, no me asustes! Y pensé que no estabas en casa.- dice la pelirroja. Ladeo mi cabeza confundida y miro a Tessa, quien tiene cara de "huele-a-mierda". -Tu hermana nos dijo que habías salido.

Volteo mi rostro como en el exorcista hacia Tessa, extiendo mi mano y Cara entiende al instante, me pasa un tenedor de plástico.

—¡Corre, bitch!

Grito antes de perseguir a Tessa por la casa, ella asustada corre como alma que lleva el diablo. La alcanzo luego de dos segundos. Ja, maldita lenta.

—¡No me hagas nada! Juro que pensé te habías ido.- replicaba ella cubriéndose para no recibir un golpe. -¿Plox?.- añade finalmente la teñida.

La suelto y tomo una galleta Oreo podrida que estaba en mi bolsillo desde hace un año. Lo sé, que asco. Se la meto en la boca y ella casi vomita al ver la galleta llena de mierdas.

—Traga, animal...por cierto, no toquen mis juegos de Zelda mientras voy con Rei.

Digo, recordando al chico de nuevo ingreso. Bajo las escaleras de dos en dos, dando saltitos. Mara babeaba por ver el torso de Tristan, o sea, ni quién no...

—¡Zorritas. Me largo con alguien re cool!- lanzo un gritito chillón, tomando la atención de todos los presentes. Tristan me mira enojado pero a la vez gracioso.

—Nadie es mejor que yo.

Presume Tristan y se levanta. Llega a mi lado y me carga como saco de....sandías. ¿Qué, esperaban que dijese saco de patatas? Pues no, a mí me gustan las sandías y punto.

—No, Tristan. Nadie lo es.- susurro tiernamente en su oído. -¡Excepto Rei y yo, bitch!- agrego gritando.

Salto de su hombro y me largo corriendo. ¿Qué? Juliet Sutton Collins NO es normal. La puerta estaba abierta, ya que segundos antes Mathew la había abierto para ir al jardín....es muy raro el chico.

La casa de Rei queda a cinco calles...creo que llegaré en veinte minutos. ¡Mierda! Mejor le pido a los chicos que me lleven. Vuelvo a entrar a la casa, ganándome una mirada extrañada y burlona de los ahí presentes,

—¿Alguien me lleva a casa de Rei?

Preguntó con una sonrisa más falsa que el culo de Nicki Minaj o cómo se pinches escribe esa miermelada de cameio.

Mara me mira con las cejas alzadas.

—Yo te llevo, si le haces un favor.

Dice en tono burlón. Yo niego y grito.

—¡Con amigos cómo ustedes para qué enemigos! Por cierto, me voy caminando y tú.- señalo a Tristan. -Me vas a acompañar quieras o no. Tengo algo que decirte.

Tristan se encoge de hombros y me sigue fuera de la casa.

—¿Qué sucede?

Pregunta el castaño mientras caminamos hacia la casa de Rei.

—Le gustas a Tessa.

Suelto sin más. Él para repentinamente haciéndome sobresaltarme.

—No te creo, por el amor a Zelda y el anime. No te creo. O sea, ella es muy....linda y yo no soy nada.

Okay, eso no me gusta para nada. Tristan está enamorado de Tessa y seguramente le pida ser su novia pronto. Carajo. Carajo. Carajo.

—Bájate del pony, hijueputa. Le gustas, no te ama.

Exclamo intentando no golpearlo en el rostro tan perfecto que tiene.

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En multimedia Juls.