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Llegue al Pub estaba lleno para ser miércoles, busqué a Sam estaba en la barra acompañada así que preferí no molestar.

-Peter-llamé al viejo Peter, él es el dueño del lugar es muy amable.

-Jovencita, hace bastante no pasas por aquí ¿Que deseas tomar?-sonrió.

-Lo de siempre Pet.

-Mi niña, nunca cambias -sirvió mi copa de vodka -¿Y tus amigos? O bueno tus amigos de copas.-se fue a servir otros tragos aproveché y me tomé el trago.

-Jacob- dije -no nos vemos desde que tiene novia, ya sabes con eso que piensan que me acosté con él, la novia no lo deja verme ni escribirme.

-Gillipolleses, tu no eres capaz, yo si te creo.-me guiñó el ojo.

-Gracias sos genial amigo, puedes traerme otro.

-A tus ordenes pero me preocupa quien te lleve hoy.- él es muy gentil y todo un caballero, era muy común que Jacob, Sam o Vikky me lleven a casa después.

-Ya veré tranquilo ¿Vale?

-Vale. -me tomé el trago y salí a la pista de baile, la canción que sonaba era perfecto, no es que sea buena en esto pero uno aprende.
Sentí que alguien se acercó a mi, me tomó por la cintura y bailamos juntos. Un chico alto, blanco y de ojos grises. Le sonreí, él por su parte también me sonrió y se acercó más y me susurró.

-Soy Alejandro pero dime Alejo.

-Mariam- seguimos bailando cuando terminó la canción nos dirigimos a una mesa y el pidió dos tragos más, pero yo fui al baño y encendí un cigarrillo, ese chico está guapo y yo lo unico que necesito es tranquilizarme.

Llegue y Alejo tenía los dos tragos sobre la mesa pero en cuánto los vi los tomé uno tras otro.

-Disculpa-dije.

-No pasa nada-dijo amablemente.

-Llévame a tu casa- extraño a Jacob es muy buen chico siempre me cuida aunque debo recordar que él no es Jacob y puede malinterpretarme.

-Mariam ¿ Donde demonios haz estado?- gritó Sam

-Pues aquí amiga.-la saludé.

-Déjame te presento a Alejo, es mi primo -señaló al chico que estaba conmigo-¿Está guapo verdad? Tenía que ser mi primo- le guiñó un ojo.

-Ya lo conocí, bueno en realidad ya nos íbamos ¿Cierto?-miré al chico y tome su mano sin previo aviso.

-Emm si ya nos marchamos -se levantó de la silla.

-¡Que va! No cambias verdad siempre me abandonas, aunque esta vez por él y no Jacob.

-Pues si Sami-la abracé.

-Tú-lo señaló-Cuidala porque si no te mató ¿Comprendes?- advirtió y el asentió- y tú -dirigiéndose a mi -no se te ocurra revolcarte con él.

-Ya bajale, pareces mi madre Sam.

-Luego no digas que no te advertí de una enfermedad o un embarazo.

-Ya lo sé.

-Tranquila prima, ella no me a dejado tomar ni un trago.-literalmente , asi que tiene razón.

-Más te vale, ahora si, váyanse.


Salimos del Pub y me llevó hasta el auto un BMW negro, estaba hermoso.

-¿Aún te quieres ir conmigo? Porque no me conoces.-me recordó él.

-Tranquilo esa es la mejor parte.

Su departamento era relativamente pequeño, estaba la sala unos sillones negros y una cocina muy limpia y nítida o una de dos: -Alguien le hace el aseo ó-no vive aquí.

-Vamos al balcón ¿Quieres?

-Por favor -me senté en una silla, había una hermosa vista quedaba a edificios de Salamanca pero que me permitían ver el cielo, él trajo un vino y dos copas- Es hermoso el lugar, poder observar la belleza que tiene el cielo y todas sus estrellas.

-Lo es, por eso me quedé aquí.-dijo el sirviendo mi copa.

-Gracias por traerme aquí.-Le dí una cálida sonrisa.- ¿Puedo?- señalé mi cigarrillo.

-Claro, pero sólo aquí, no adentro.

-De acuerdo.

-¿Porque haces esto y quien es Jacob?-Se detuvo a meditar lo que había preguntado-Disculpa no debes contestar si no quieres, no es necesario.

-¿Esto que?-dije, porque la verdad no se a que se refiere.

-Fumas y te alcoholizas por diversión y luego le pides a tu chico que te lleve.
Esto es difícil de explicar sólo Jacob sabe muy bien lo que pasa conmigo, es algo tan normal que me vaya con él y me quedé a dormir que ya no era tan necesario platicar además algunas veces no llegaba en condiciones.

-Puedes creerlo o no, la verdad no importa, lo hago porque me gusta y por que es mi escape..

-¿De que escapas?.-preguntó.

-Pues bien mis padres no me soportan y creo que ni yo lo hago.

-Esa no es razón- claro que no, no te diré la verdad, no me gusta hablar de esto.

-Mira esto es incómodo, pero debo descansar, hablamos luego.-me dirigí hacia la puerta del departamento cuando noté que él venía detrás de mi.

-Yo te llevo.

En todo el camino a mi casa le di instrucciones de mi dirección y por ratos se hacía un silencio incómodo, claro es normal somos extraños. Llegamos le di las gracias y regrese a mi casa relativamente temprano, ya que nunca llegaba a esta hora, las luces estaban encendidas, eso fue extraño.

-¿Mariam?-pregunto la ama de llaves.

-Si señora- sólo falta que ella también quiera saber si estoy fumando.

-Creo que debes subir y ver a tu hermana esta triste, la dejaron plantada- ¿Enserio? Que tonto, quien sería él que le hizo eso. Subí para hablar con ella y darle consuelo, claro siempre yo dándole ánimos a los demás y yo no resuelvo mis problemas.
La puerta estaba abierta igual que la de mi habitación pero ignore ese hecho y pase a buscarla para decirle que lo sentía y que ese tipo era un gilipollas.

-Es un tonto Miriam, ya habrá otras personas que si te valorarán- la animé.
-Dijo que estaría en el Restaurante- dijo sollozando.- pero nunca llegó - y rompió a llorar.

-Debes descansar.- me puse en pie para salir de la habitación.

-¿Manita?- llamó ella ¿Estábamos uniéndonos otra vez?

-Todo irá bien, mañana hablamos.
Salí de la habitación a punto de llorar, creo que también la extraño pero aún no lo puedo admitir.

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¿Odiando O Amando A Dereck?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora