Dos semanas habian transcurrido desde el dia en que Frederick habia hablado con su madre y con suerte solo le habia enseñado a Valentina inglés y algo de francés. La chica era inteligente y su memoria era excelente, lo que le facilitaba, en cierta forma, las cosas a Frederick. Ahora estaba irritado. Su yet no se encontraba listo y ya llevaban mas de dos horas en el aeropuerto.-Tranquilizate. Podemos ir en un avion normal
La miro y sintió su enojo disminuir. Ella era tan pacifica. No habia vuelto a besarla. Sabia que se habia propuesto algo pero no podia hacerlo. Algo se lo impedia.
-Si yo requiero de mi yet, debe estar disponible pqra cuando yo lo quiera-al verla agachar la mirada supo que su tono fue demasiado rudo. No estaba hablando con un empleado, estaba hablando con la que seria su futura esposa y quien aun no lo sabia.-lo lamento-suavizó su tono.
-Lo entiendo-Valentina miro a todoa lados menos a él-tu eres el jefe
-Yo no soy el jefe, maldicion-gruñó bajo-soy solo Frederick.
-lo que usted diga, Señor
Se levanto de su asiento. Estaba molesto e irritado, una mala combinacion en él. Lo que menos quería en ese momento era discutir con Valentina. Su madre y sus hermanas habian estado llamandolo pero no contesto ninguna llamada. Se dirigía a la caferetia por un Americano Negro cuando su telefono sonó de nuevo, pretendia ignorarlo pero al ver quien era decidio contestar con un suspiro:-Dime, Sophie
-Lamento interrumpirlo, Señor
-No lo has hecho, siento que si me quedaba pensando otro minuto más, explotaria a mitad del aeropuerto
La gente lo miraba mal al gruñir en francés pero él no les tomo importancia
-No creo que le vaya a gustar lo que le voy a decir
-Solo dilo, maldita sea-gruño
-El señor Mark Shung lo solicita en Japón para dentro de cuatro semanas, Señor. Dice que es urgente
Lo único que le faltaba: su socio japones. Ese día iba empeorando a cada minuto
-Le explicaste que sigo fuera de Europa?
-Si, Señor. Pero me dijo que esto era importante
Inhalo tratando de calmarse-¿Algo más?
-No nada, Señor-colgó antes de que pudiera decirle algo más.
Pidio su cafe y para el momento en que regreso a su asiento, Valentina se había ido. Gritó interiormente llegando al limite. Miro a todos lados pero no habia ni rastro de la chica.
La busco en todas partes y rendido, se sento furioso en el pequeño sofa
-¿Sigue teniendo un mal dia?-susurro la suave voz de Valentina en su oido
Se volteo con los ojos llenos de ira-¿Donde estabas?-demando-llevo buscandote media hora. ¿Donde jodidos estabas?
La sonrisa se le borro del rostro y lo miró confusa-fui al sanitario
-¿Media hora? El maldito yet esta esperandonos hace cinco minutos y ¡¿tu estabas en el maldito baño?!
-Una agradable ancianita me saco platica y se me hizo grosero dejarla hablando sola
-Una ancia....-se corto incredulo-¡¿una ancianita?! Tenemos prisa, Valentina. No es momento para platicar con agradable ancianitas. Yo no pague para...-Valentina lo interrumpio dandole una sonora bofetada. Las personas que estaban a su alrededor los miraban con descaro y asombro.
-Sé que pagaste por mi pero no tienes que restregarmelo. Ahora, subire mi trasero a ese estupido yet y tu te tranquilizaras porque no volvere a hablarte hasta que dejes de comportarte como un idiota.-se dió la vuelta y tomando su maleta, se fue en direccion a la linea de abordaje del yet.
Su mejilla escocia y sentia la mirada de todos clavadas en él. Gruño bajo y molesto tomó su maleta siguiendo a Valentina.
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Francés® (Terminada)
RomanceFrederick era totalmente opuesto a lo que era Valentina. Ambos vivían en mundos y comodidades distintas. Él, a sus 29 años, era un magnate, dueño y presidente de Rousseau Enterprices, Inc. la empresa mas importante en la Industria Maderera. Ella era...