Capítulo 70

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—¿Que, qué?—Frederick miraba a Sophie sorprendido.—Sophie...

—Ya lo sé, Frederick, lo sé. He cometido una locura y estoy consciente de que la he liado terriblemente.

Frederick la abrazó al ver que Sophie comenzaba a temblar ligeramente.

—¿Kendall qué opina?

—No lo sé. No he hablado con él.—Sophie sorbió la nariz—No he querido hablar con él.

—Cuando me comprometí a Valentina, ustedes dos ya habían tenido intimidad, ¿verdad?

Sophie asintió, sin mirarlo a los ojos.

Frederick suspiró inaudiblemente—Debes de hablar con él, Sophie. Ayer estuvo en casa de mis padres después de pasar a recogernos al aeropuerto y realmente lo vi distraído y pensativo. Tú y yo sabemos que Kendall no perdería una oportunidad de echarme pulla y sin embargo, ayer parecía otro.

—No servirá de nada hablar, Frederick. Lo hecho, hecho está y no podemos cambiarlo.

—No digo que lo hará, pero, ¿Y si él se siente de la forma en la que tú lo haces?

—Eso es poco probable—Sophie sorbió la nariz.

—Te sorprenderías de lo que...—en ese momento el teléfono celular de él comenzó a sonar y con una sonrisa de disculpa, se levanto, dándose la vuelta para contestar. Por el rabillo del ojo pudo ver como Sophie salía de su oficina en silencio.—¿Si?

—¡Valentina, suelta eso, es horrible!—escuchó a Aline gritar—No vas a ponerte eso.

—¿Aline, todo bien?

Frederick se frotó el puente de la nariz. Seguramente entre todas las chicas seguían de compras. Eran realmente un torbellino y sabiendo que tenían poco tiempo, no habría nadie que las parase.

—Sí, querido hermano mayor. Es solo que tu hermosa novia y prometida tuvo la osadía de despreciar uno de mis conjuntos de lencería más sensuales y en su lugar tomó un conjunto que ni la tia abuela Hess se pondría.

—No son tan terribles, solo un poco discretos—escuchó a Valentina defenderse.

—¡Claro!—Aline concedió—demasiado discretos aún si estuviésemos en el Siglo XII.

—¿Me has hablado para quejarte de lo que mi prometida escoja?—preguntó Frederick, burlón.

—¡Oh, no!—Aline pareció entusiasmada de nuevo—Ya tengo la lista de invitados. Las gemelas y Bastian han trabajado duro en ello y está lista.

—Aline...—se quejó Frederick mirando su reloj en la muñeca—apenas han pasado cuatro horas desde que les dijimos cuándo nos casaríamos.

—¿Te crees tú que a toda la gente que hemos invitado deberíamos mandarles la invitación un día antes? ¡De ninguna manera!—su hermana contestó su propia pregunta, indignada. Haciendo que Frederick soltase una risa por lo bajo.

—Ponla al teléfono.

—Está muy ocupada probándose esa aberración.

—Estoy seguro que lo cogerá, solo ponla al teléfono.

Se oyeron unas voces sofocadas y luego, la dulce voz de Valentina estaba al teléfono. Sonaba irritada.

—Aléjate, quiero mi privacidad al hablar con él.

—Privacidad tendrán cuando estén de luna de miel.

Frederick reprimió una carcajada al escuchar a Valentina quejarse en español antes de dirigirse a él.

Francés® (Terminada)Where stories live. Discover now