Cap 10

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*Kageyama*

Iba camino a clases y pude divisar justo en la entrada de la institución al peli naranja, quien se encontraba hablando con Yachi. Sé que ella le rechazó, él mismo me lo dijo, pero por lo que veo Hinata no piensa en rendirse.

Pensé en ir a donde se encontraba Hinata, pero no lo hice. Además ¿cómo rayos podría ver a Hinata a la cara? Esto de que me guste un chico es un lio y no solo eso tras de todo ese chico era Hinata Shojo. ¿Por qué dentro de todas las personas en este universo tenía que ser él?!!

....

Me dirigí a mi respectiva aula, hoy empezaría el día con clases de matemática. Entre al aula coloque mi bulto al lado izquierdo de mi pupitre y me senté y a los pocos minutos llegó el profesor.

Ya había pasado media clase y estaba al borde de la demencia. No comprendía nada de lo que decía el profesor y digamos que es aún más difícil prestar atención en clases si no dejas de pensar en esa persona en particular. Te odio Hinata por culpa tuya no logro entender un carajo de lo que explica el profesor.

...

Por fin sonó el timbre que anunciaba el comienzo de la hora de almuerzo. Como siempre me dirigí a la máquina expendedora de comida para sacar de ella una cajita de leche. A pocos metros para llegar a mi destino pude divisar a la persona que muy pronto terminaría llevando me al manicomio.

Seguí caminando hacia la máquina expendedora, mientras me acercaba, pude notar que el enano de pelo naranja, que estaba recostado a dicho aparato tenía una expresión seria y pensativa.

Hinata?- le llamé la atención pues al parecer no notó el momento en el que llegué.

Me volteo a ver- Ka...Kageyama!!- dio un salto por la sorpresa pero luego volvió a poner ese semblante serio en su rostro- Te estuve esperando-. Enarqué una ceja esperando a que continuase mientras bebía de la cajita de leche que había sacado de la máquina.-Bueno,...puedes decir me ¿qué rayos te pasa?- se cruzó de brazos.

A que te refieres?- le respondí con otra pregunta.

No sé qué carajos hice como para que te molestaras con migo- alegó- creí que ya estábamos bien, pero noooo, días después te comportas sumamente raro y has estado más molesto.

Bueno, yo...- No tenía idea de que responder ¿Enserio me había comportado así?- Si llegué a comportar me así no me di cuenta y no tengo idea del porqué de mi comportamiento aparentemente extraño para ti- mentí en lo último que dije.

Como no tienes idea?!!- chillo- es imposible que no tengas una razón. Y antes de que me digas ''no te metas en mis asuntos. ¿Qué te va estar importando lo que me pase?''- imitó mi voz- Pues bien, la cosa es que me importa lo que te pasa porque eres mi amigo. Kageyama, puedes confiar en mí.

No lo entenderías- respondí.

Eres cruel - me reprochó- yo te eh contado secretos y tú no has querido decirme uno solo. ¿No confías en mí?- me miró con tristeza.

Es cierto soy cruel- sonreí cínicamente- después de todo soy un rey. Y en cuanto a mi secreto es mejor que no lo sepas.

Por qué?- Al parecer aquel chico ya no se intimidaba tan fácilmente.

Porque si te lo digo...posiblemente no quieras hablarme ni ver me a la cara- respondí.

Baka- dijo y le mire molesto- Kageyama eres mi amigo, porqué te rechazaría? Además, si soy tu amigo es porque te acepto tal y como eres y eso incluye tus caprichos de rey. O acaso...soy el único que cree que somos amigos?- dijo caris bajo.

Si supierasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora