9 |Editando|

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Perdí la noción del tiempo entre algunas cuantas bebidas que me insinuó a tomar Denisse. Según mis cálculos, no tenía ni una hora de estar aquí. Denisse se la ha estado pasando conmigo todo este tiempo; entre tragos, sonrisas, carcajadas, y solo uno que otro baile. Y no es porque yo le haya invitado a bailar, ella solo me arrastro hacia la pista y comenzó a moviendo sus 'curvas' más de lo necesario. Yo bien le aclare que yo no sabía bailar, pero eso no le impidió a ella, moverse muy provocadoramente cerca de mí. Yo esperaba haber tenido mi primer baile serio (por mas ridículo que suene)  con alguien especial; ____ era más que nada el motivo por el que estaba aquí pero en vez de eso, Denisse, la chica que me ha tenido loco desde hace un par de años, por fin me toma en cuenta y hasta me halaga con sus comentarios; se supone que debería estar más que feliz porque la chica 'más linda' de Lancaster no se ha despegado de mí... pero de alguna forma, no lo estoy. 

Paramore inundó la habitación, provocando que  el ajetreo comenzara de nuevo en la pista de baile. Denisse me jaló hacia ella para estar mucho más juntos que antes. Todas las oportunidades que se le presentaban para restregar su cuerpo junto a mío, no las dejo pasar para nada. Esto ya me estaba comenzando a incomodar.  

Miré distraídamente por encima de su hombro para encontrarme con el rostro de ____. No dejaba de sonreír y hablar por encima de la música a quien quiera que fuese con el que bailaba. Vi cómo se le acercaba mientras le decía algo en el oído antes de caminar hacia afuera de la carpa. El tipo comenzó a caminar hacia la barra, mostrándome su perfil y parte de su rostro. Era Liam... 

—Denisse —le dije en el oído-—iré al sanitario. 

Ella asintió sacudiendo la cabeza mientras seguía bailando. 

Comencé a caminar con mucha precaución de que la mirada de Denisse no me encontrara dirigiéndome hacia donde ____ se había ido. 

El aire fresco se estampo en mi rostro. Esto se sentía mucho mejor que el aire sudoroso que había halla dentro. 

Giré mi vista hacia ambos lados. El color del vestido de ___ me ayudo a localizarla rápidamente. Se encontraba sentada en una banca compartiéndola con una pareja que no dejaba de compartir saliva a unos cuantos metros de mí. 

Caminé decidido y a la vez con algo de inseguridad naciendo dentro de mi mientras iba pensando en cómo se tomaría la sorpresa de encontrarme aquí. Mientras más me acercaba, pude ver que ella no movía su rostro del frente, se veía perdida en sus pensamientos. 

Tratando de parecer lo más normal posible, tomé asiento junto a ella, pero me senté hasta la orilla de la banca. 

Los sonidos que no dejaban de hacer la chica y el chico, era muy incomodos, pero hice mi mejor esfuerzo por poder ignorarlos. 

Se escucharon susurros por su parte, la chica soltó una risa para luego irse caminando hacia dentro junto con el chico de la mano. 

Bien, un punto a mi favor. Pasaron unos cuantos segundos donde solo se escuchaban nuestras respiraciones. Bueno, es ahora... 

—Creí que no ibas a venir —Abrí mi boca para hablar pero ___ me interrumpió sorprendiéndome por lo que dijo. 

—Pues estoy aquí —dije mirando el perfil de su rostro tratando de sonar lo más normal posible— mi mamá y Gemma me obligaron. 

Ella soltó un gemido de fingido asombro. 

—Nunca me dijiste que asistirías con Denisse. Eso me lo hubieras dicho desde hace tiempo en vez solo rechazarme justamente el día de hoy —Su voz no expresaba ningún rastro de algún sentimiento contradictorio. 

¿Y dónde quedó el Nerd?|Editando|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora