¿Hard?

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Capitulo KiyoshixKuroko.

Dedicado a MrPioFujoshi

Advertencia: Tiene escenas de sadomasoquismo.

Una vez terminadas las practicas del club de basquet de la preparatoria. Kiyoshi y Kuroko eran los únicos que se habían quedado, empapados de sudor. El más alto cierra la puerta con llave para que no pueda interrumpir nadie en lo que planea hacer.

- ¿Por qué cierras? -chilla asustado como si fuera una rata de experimento-

-Porque quiere tener sexo aquí, contigo.

Kuroko se sonroja por las palabras mencionadas, pero asiente ya que le da lo mismo, uno más uno menos es lo mismo, refiriéndose claramente a que se a acostado con mucha gente.

Kiyoshi sin esperar ni un segundo más, apreso los labios del menor, formando un fugaz beso francés, describió la lengua del menor como algo suave y pegajoso pero deliciosa de probar una y otra vez.

Cuando termino el beso, Kuroko desabrocho, temblorosamente, los pantalones del contrario, cuando retira tanto esa prenda como su ropa interior comienza a lamer con timidez, pero descaro el falo erecto.

Suelta quejidos roncos por el placer que le esta entregando aquella pequeña cavidad bucal caliente y húmeda. Al escuchar los gemidos de este, aumenta el ritmo de sus auto embestidas logrando que el adyacente eleve sus sonidos lujuriosos.

Entre tanto jugueteaba con su miembro, empezó a masturbarse a si mismo, goteando liquido pre-seminal por la excitación que le generaba estar haciendo aquello sin pudor alguno.

Sin poder aguantar, termino corriéndose en la garganta del menor, soltando un sonoro quejido ronco de éxtasis. Sin poder anticiparse se ahoga con el semen de este, siendo la gran mayoría de este fluido tragada y la otra brotaba por la comisura de sus labios, la cual fue retirada por el mayor formando así un pequeño beso blanco, el cual ambos disfrutaron.

Kiyoshi sin poder contener su nueva erección, recuesta a Kuroko en el piso, posicionándose sobre de él y frota suavemente su miembro contra su entrada. El peli azul al sentir aquello se aterra por lo doloroso que podría llegar a ser eso sin una preparación previa.

-No lo metas -susurro con miedo-

-Ja, ¿qué si lo hago? -decía mientras hacía presión contra su entrada- ngh... que, apretada, dan ganas de penetrarla.

-Ah -soltó un leve quejido y casi se desmalla al imaginarse aquel trozo anormal de pene dentro suyo- no, por favor, no.

-Pero sé que te va a gustar -presiono su punta fuertemente contra aquel orificio, logrando entrar con esfuerzo-

El sonido de desgarre que se escucho en la sala fue estruendoso, Kuroko derrama unas cuantas lagrimas por el dolor que aquello estaba provocándole, aunque para su bien eso se sentía bastante suave comparado a otras veces, quizás se estaba volviendo masoquista o su interior era más dilatado que antes.

Kiyoshi al escuchar el grito, ese quejido era una melodía exquisita por ende se imaginarán que su miembro ya erecto se endureció aun más. Fue metiendo su longitud lentamente por ese estrecho camino. Suspiraba de placer.

-Kuroko, tu interior es muy placentero, me estas succionando como si lo quisieras solo para ti -murmuraba entre gemidos-

Las expresiones del mayor eran de solemne gozar, en cambio las del otro eran de sufrimiento con algo de entretención. Cuando Kuroko sintió el abdomen del contrario contra sus glúteos, exhalo todo el aire contenido, se alegro un poco al saber que aquello era todo lo que más podía adentrarse, pero poco le duro aquel momento cuando percibió las estocadas, lentas, pero con aquel dolor imprescindible, de hecho, daría por sentado que estaba sangrando, aunque fuese un poco.

Sin darle importancia al pequeño flujo rojo que salía de ahí, continúo penetrándolo, gentilmente para no hacerle una herida y tener que terminar aquel momento de intimidad. A medida que se percataba de la expansión, embestía con mayor velocidad, sacándole varios gemidos de agonía al pobre peli azul, el cual veía borroso, sentía placer, pero bastante dolor.

Fue recuperando la vista de a poco y pudo percatarse de que estaba gimiendo por las embestidas, notaba como rozaba algún punto de su interior que lo volvía algo sensible, gimoteaba cada vez que ese punto era presionado. El mayor se dio cuenta de aquella información para empezar un vaivén de embestidas contra aquel sector. El contrario era un mar de notas musicales para el más alto.

Sudor, quejidos, expresiones de placer, el irreconocible sonido de algo chocando con algo era audible. La habitación era un desastre, no por que fuera a estar desordenada si no, más bien por aquel actor carnal entre aquellas personas, cualquiera que entrara a la habitación, una se disculparía y se iría, dos quedaría traumado y otra opción seria que se quedara observando la escena y luego se masturbara como el pervertido que es. Obviamente como estaba cerrado con llave nada de eso sucedería.

Mientras el menor se perdía en el placer brindado por aquella sensación electrizante producida por el miembro del contrario, él disfrutaba de embestirlo, aquel intimo lugar le gustaba, ya estaba casi completamente abierto de tanto moverse, eso no lo detuvo ni un instante en disfrutar de la sensación, a pesar de no apretarle tanto, los gemidos que le generaba al menor lo excitaban inconscientemente.

Los dos sabían que quedaba poco para el clímax, intentaban alargarlo, el peli azul retenía sus gemidos de regocijo y el de cabello oscuro penetraba lentamente, pero eso duro tan poco, ya que la excitación por ver el cuerpo y las expresiones del contrario rompió aquel esquema de tener que durar más.

El choque de la pelvis contra el culo, aquel sonido se incremento dando a entender que se estaba moviendo con rapidez, imposible de contenerse, de dominar su propio cuerpo, se dejo llevar por el deseo de acabar, de finalizar lo que había ya disfrutado bastante.

Bastaron unas dos o tres embestidas más para que aquel liquido espeso como la saliva, pero que claramente no era eso, se adentro en lo más profundo del menor. Claramente se escucho el estruendoso orgasmo. Al ver el cuerpo del menor se percato de que estaba cubierto de semen, ninguno de los dos había sabido hasta ese momento que este se había corrido incontables veces mientras era penetrado, de hecho, se podía ver como su miembro goteaba líquido, literalmente podría llenar un baso con toda su esencia que dejo esparcida.

Recuperaron sus respiraciones y ambos se acercaron para darse un beso íntimo, aquel beso no era inocente pero tampoco muy lujurioso, tenia ese toque especial de que algo podría llegar a suceder o de que algo ya sucedió.

Fin.

Espero les haya gustado. Por mi parte disfrute editarlo, siento que el contenido cumple con la expectativa del título. Si te gusto alguna parte eres libre de comentarla.

Quieres... tener... sexo?Where stories live. Discover now