Potion ×Yoonmin×

16

Regresaron muy tarde, el viaje de vuelta para su pueblo fue más largo... Yoongi suspiró, intentando no moverse al sentir las cabezas de Gia y Jimin, en sus hombros, ambos habían caído dormidos luego de aburrirse de ver el paisaje exterior.
La nota que ahora releía una y otra vez, se encontraba algo arrugada, estaba por romperse; cerró su puño con ella y con el más sutil cuidado, movió su brazo derecho intentando no despertar a Jimin. Se detuvo cuando escuchó un leve balbuceo que la castaña había dado y que luego giró su cabeza, liberando su hombro. Con su mano izquierda, agarró la nota para poder guardarla en los bolsillos de los jeans, prestados, que llevaba puesto.

El conductor estaba concentrado en la ruta y no había dirigido ni una palabra ni mirada a ellos, y lo agradecía internamente. Examinó a Gia, la pequeña bruja llevaba entre sus brazos su bolso de piel al cual sujetaba fuertemente, allí estaba guardada aquella particular joya con suma protección. Ahora miró a su lado derecho donde su nariz y boca fueron rozadas por el cabello del pelirrojo que se le pegaba fuertemente y no podía quitarlo de encima, ni quería. En silencio miró más detenidamente la cara del hechicero, se le notaba cansado así como él había estado semanas atrás.
Se sentía culpable cuando su memoria le hizo presente las veces que le gritó por no poder regresarlo a su cuerpo humano y, tal vez, lo lastimó sin intención, por el hecho de acabar como ahora era.
Se mordió las mejillas internas, ¿actuaba así, porque ese era su verdadero "yo" o porque sólo estaba muy estresado con tanta mala suerte que cargaba encima? Muchas veces se había cansado de contar los momentos tristes que tan marcado lo dejaron con sus manos, y que los dedos no le alcanzasen paro ello, como cuando intentaba recordar los momentos donde había sonreído y había sentido felicidad y no podían enumerarse de tan casi inexistentes que eran.
Por primera vez, se sentía obligado a disculparse como una buena persona que debía de ser, si se ponía a pensar... su culpa era en primer lugar por mandar a la mierda a sus progenitores y recorrerse la ciudad entera, intentando encontrar algo que lo ayudase a distraerse, su culpa era el haber olvidado el camino de regreso y haber bebido aquella bebida por el impulso del cansancio apoderándose de su cuerpo. Su culpa era enojarse, gritar y regañar al extraño chico que era dueño de aquella pócima, aquel hechicero que no tenía del todo la culpa haber dejado ese vaso de vidrio a su alcance, su culpa era que también notase como el cansancio consumía el cuerpo del pelirrojo, su culpa era que este hiciese más muecas que sonrisas.

Sin darse cuenta estaba conteniendo la respiración mientras rozaba con su dedo índice la cara de Jimin, intentando contar cuantas pestañas tenían sus ojos, intentando saber si aquel rostro sinceramente se encontraba descansado o si podía descifrar cada emoción que pasase por aquel puro corazón. No podía saberlo, nunca lo sabría. Lo único que sabía era que se sentía la peor persona desde que comenzó a sentir como era atacado por sí mismo al tratar tan mal a quienes no eran culpables.

Sintió como el cuerpo del menor seguía bajando de su hombro, a su pecho. Como acto de reflejo llevó sus brazos para sostener la espalda del hechicero, que cerró sus manos a sus hombros nuevamente. Apreció como Jimin soltaba una queja y se acomodaba nuevamente, dejándole ver mucho mejor su cara. Sus ojos no se habían abierto en ningún instante solo su cuerpo era el que se había movido inconscientemente.

El rubio cerró también sus ojos, consumiendo el cansancio que el hechicero le contagiaba, dejando que su cabeza cayese hacia abajo, cerca del rostro del menor sin notarlo.

—Lo siento, por todo. Lo siento. —Susurró inaudible Yoongi, apretando más el agarre a Jimin temiendo volver a lastimarlo si no lo sujetaba lo suficientemente bien.

Y sintió un roce, seguido de un suspiro, en sus labios que le bastaron para hacer que su corazón se detuviera por minutos y al abrir los ojos se encontrase con lo más hermoso que hasta hace rato nunca había notado ni visto de esa forma.

Con un simple contacto, logró hacerle ver mil y un maravillas escondidas y tal vez algo más de lo que aún no estaría consciente.

¿Qué diablos había hecho Jimin con Yoongi?

Gia sin querer ver, se relamió los labios y con el anillo que llevaba escondido en su mano, se lo puso en su dedo anular, aguantando no soltar un gran suspiro y dejar que las lágrimas se adueñasen de sus emociones.
Intentó buscar algo más dentro de aquella herida en su ser, ignorando el hecho de que desde hace tiempo había cedido, dejando a Jimin ser querido como debía ser; no por una impostora como ella, no como ella siendo hija del asesino de la madre de aquel pelirrojo, quien se colaba cada noche en sus sueños, esos sueños donde le prohibiría aparecer de ahora en más, aquel chico del que ni siquiera merecía haber sido perdonada... pero haría todo por recompensarlo y eso significaba dejarle ser feliz a su manera.

Se encogió más en su lugar, apretó con desesperación su bolso como su única consolación, "¿no estaba haciendo lo correcto?"

"No llores." Alguien invadió su mente y sintió que se relajaba, no estaba asustada, para nada, sabía muy bien de quién se trataba.

"Dominik, sal de mi mente." pensó, advirtiéndole.

~Nota~

Holaa, buenos/as días, tarde, noche, ¿cuando lean xD? He regresado (yey) he estado viendo que ya llegamos a los 3,4K y Dios, no pensaba que hasta aquí estaría, muchas gracias en verdad❤ espero que me sigan apoyando así ^-^ disculpen mi ausencia 💕
Siento que el capítulo esté algo corto y aburrido, pero era necesario para ciertas cosas en la historia (: prometo mejorar en los próximos 😂 y pues eso asgfd.

#AmorInfinito💕

-Yoonmin Actual para todos ¬u¬💁